No hace falta vivir de dieta en dieta para estar en forma y saludable, en este artículo te lo enseño
Tradicionalmente la palabra dieta siempre se asocia a restricción calórica, hambre, o pérdida ponderal lograda con sufrimiento y mal humor. Realmente para la ciencia de la nutrición la palabra dieta evoca todo alimento y bebida que consumimos a diario. Por ende, no es necesario llevar una vida de restricciones, dietas de moda, tratamientos costosos y exhaustivos que te llevan a vivir un sube y baja de emociones, frustraciones y de peso, sin llegar nunca a la meta, o llegar, pero no mantenerte en ella.
Para mantener un peso estable y saludable, debemos en primer lugar cambiar mentalidad, saber que realizamos los cambios por nuestra necesidad de salud y no por una moda o para usar una talla de ropa específica. Una vez internalizada en nuestra consciencia esta afirmación, podemos ya poner manos a la obra.
Desayuna como un rey
Así dice el dicho “desayuna como un rey”, y es que no importa ni donde ni cuando, nuestra primera comida del día es la más importante. Después de una noche de reposo y ayuno, nuestro organismo no pide más que nutrientes y energías para comenzar con buen pie el día.
Al despertar bebe un vaso de agua para activar tu metabolismo, luego desayuna nutritivo, evita los cereales comerciales llenos de aditivos, conservantes y azúcares escondidos, prefiere cereales como la avena por ejemplo que son ricas en proteínas vegetal y de bajo índice glicémico. Como fuente proteica el huevo es un gran aliado.
Evitemos los embutidos como fuente proteica debido a su alto contenido en grasas, sodio y conservantes. Las frutas no pueden faltan en nuestro desayuno.
Sabemos que nuestra ajetreada vida no nos permite a veces tener el suficiente tiempo de preparar desayunos nutritivos y sentarnos a comerlos, cayendo en el consumo de productos que son más de más fácil acceso como las bollerías, cereales comerciales, etc pero debemos realmente programarnos y sacar el tiempo para una acción tan importante como lo es el desayuno.
Respeta las horas de comida
No hay nada más favorable para la estabilidad en el peso que mantener horarios fijos o regulares para nuestras comidas principales. El saltar las comidas, hacer una sola comida al día o enfocarnos en la noche a comer lo que no consumimos durante el día, te llevará al sobrepeso y la enfermedad
Pasar hambre no es la opción
Sé que desde siempre asociamos dieta – pérdida de peso a pasar hambre, nada más erróneo en la vida. Las dietas hiperestrictiva es decir muy hipocalóricas no tendrán el efecto positivo que crees, por lo contrario, reducirán tu tasa metabólica basal, es decir tu metabolismo se hace más lento y te costará perder kilos, mientras pasas hambre. En fin, una tortura sin sentido y sin rumbo. Cada uno de nosotros posee un requerimiento calórico diario, en el cual basarnos.
Movimiento es la palabra clave
Definitivamente el ejercicio y el movimiento es el motor en la pérdida de peso, más que matarte de hambre mejor de matas con el ejercicio.
Con el movimiento no solo pierdes peso más rápido y más fácil, además mantienes el metabolismo más activo haciendo que puedas consumir más calorías al día, y darte un gusto de vez en cuando.
Mejora la circulación, disminuye la presión arterial, disminuye los niveles de glicemia, colesterol en sangre, mejora los sentimientos de ansiedad, angustia, y estrés emocional, además te sentirás con más energía y más creatividad.
Tu plato
En vez de usar el plato más grande que tengas, usa plato llano mediano para servir en la mitad tu ensalada o vegetal cocido, en la otra mitad sírvete un solo carbohidrato (1/4 del plato = 25%) y en el otro cuarto una proteína. Con esta regla no fallarás.
Atención a lo que bebes
A veces nos focalizamos demasiado en la comida y olvidamos las bebidas. Sí, ellas también tienen calorías y un impacto positivo o negativo en nuestra salud. Es mejor deshacerse de refrescos, bebidas gaseosas, té comercial, bebidas energizantes, jugos de frutas comerciales, y apuntar a lo natural y al agua. ¿estás seguro que bebes agua lo suficiente?
Hidratación
El agua es imprescindible para la vida. Cumple un sinfín de funciones vitales para nuestro cuerpo, entre ellas el mantenimiento estable del peso. ¿estás realmente seguro que estas bebiendo suficiente agua? Para calcularlo debes aplicar esta fórmula: 35 x peso de cuerpo por ejemplo: 35 x 60 kilos = 2,100 ml = 2,1 litros diarios.
Busca una mejor forma para endulzar
El azúcar blanca o morena sabemos ya el gran daño que hace en nuestro cuerpo, entonces debemos comenzar a usar de forma racional otras formas como la estevia, la fructosa o el monk fruit.
Mantén el estrés bajo control
Cuando nos mantenemos bajo estrés de forma crónica, trabajamos o vivimos en lugares hostiles, estresantes y no logramos controlarlo nuestros niveles de cortisol y este nos hace aumentar de peso. Necesitamos tener horas de esparcimiento y controlar lo más que podamos las realidades y situaciones de nuestra vida cotidiana.
Lic Rosisella Puglisi
Nutricionista Clínico
IG @nutricionista_rosisella
