Así como la mayoría de niños vive las fiestas de Navidad con ganas e ilusión, para los niños con autismo o con otros trastornos de aprendizaje pueden significar días de mucho estrés. La interrupción de la rutina diaria, el acudir a lugares desconocidos, respirar nuevos olores, tener la casa llena de ruido y gente, etc. pueden suponer para el niño un exceso de estrés.
Estas indicaciones giran alrededor de la importancia de una planificación previa, ya sea explicando al niño lo que se encontrará los próximos días, hablando con los familiares para que tengan en cuenta las necesidades del pequeño, etc. En todo caso, la preparación del niño es la clave .
1. Reduce el estrés.
Trata de encontrar la mejor manera de reducir el estrés tanto para tu hijo como para ti. Planifica con tranquilidad las fiestas y asegúrate de que en tu casa haya espacios que permitan la relajación. Recuerda que tu hijo se ve influenciado por tu estado de ánimo, y por lo tanto, cuanto menos estrés tengas tú, menos tendrá él.
2. Pide ayuda.
Es posible que los amigos y la familia no sepan cómo actuar y dar apoyo a menos que se lo pidas. Dales una lista de las cosas que pueden hacer para darte apoyo; desde cuidar a tu hijo con autismo mientras pasas tiempo con tus otros hijos, hasta que te ayuden a preparar la mesa para la cena de Navidad o a hacer las compras.
3. Envuelve regalos que le resulten familiares.
Si tu hijo no tiene interés en abrir los regalos, ya que son nuevos y desconocidos, envuelve algunos de sus juguetes preferidos. A menudo, para un niño autista, desenvolver objetos que le resultan familiares puede ser muy tranquilizador para él.
4. Asigna una tarea a tu hijo.
Asignarles alguna tarea puede ayudar a reducir el nivel de estrés de tener gente en casa. Por ejemplo, recoger los abrigos de los invitados u ofrecer aperitivos. También es una buena idea explicarle las diferentes fases del evento: primero vendrán los invitados, luego nos sentaremos en la mesa, entablaremos conversaciones, etc.
5. Introduce nuevos olores gradualmente.
Añade canela a la plastilina con la que el niño juega, para introducir gradualmente nuevos aromas. Una de las cosas de las que más se quejan los niños con autismo durante las fiestas son la gran cantidad de perfumes que huelen. Pide a los familiares y amigos que no abusen del perfume.
6. Trabajad conjuntamente en la preparación de los regalos.
Ayuda y anima a tu hijo a participar en la preparación de los regalos de Navidad. Puede ser una excelente oportunidad para que tu hijo trabaje las habilidades sociales, que piense en las necesidades e intereses de otras personas y que sea amable y servicial.
7. Dedica tiempo a tu hijo.
Es fácil sentirse abrumado con los preparativos de las fiestas. Por ello, es aconsejable planificar las actividades de cada día para poder dedicar tiempo a tus hijos. Durante el tiempo que paséis juntos, deja que el niño tome el timón; introdúcete en su mundo y vive las fiestas a través de sus ojos.
8. Crea un calendario semanal.
Imprime un calendario que te permita pegar fotos o dibujos de las actividades que tengáis planeadas durante las fiestas. Divide las actividades en mañana, tarde, noche, etc.; ayudará a tu hijo a visualizar la semana.
9. Prepara a la familia.
Habla con los miembros de la familia con tiempo. Explícales cuáles son las necesidades específicas de tu hijo y cuáles son los planes que habéis acordado para las fiestas de Navidad. Asegúrate de que entiendan que, de esta manera, la experiencia será mejor para todos.
10. Prepara un “saco de actividades”.
Cuando seáis vosotros los que os desplacéis a otras casas para celebrar las fiestas, llévate una bolsa o mochila con los objetos con los que tu hijo encuentra consuelo y le gusta jugar; coches, peluches, CDs, libros, etc. Si tu hijo se siente sobreestimulado, busca un rincón tranquilo en el que pueda jugar con sus juguetes preferidos.
11. Enséñale fotos.
Si a tu hijo le gusta mirar fotos, puede ser una buena manera de explicarle los diferentes eventos que tendrán lugar en los próximos días. Enséñale álbumes familiares de las fiestas de otros años en los que salga él, familiares, amigos, etc. De esta manera no se sentirá tan abrumado con todo lo que vendrá.
12. Crea una experiencia alternativa.
Se pueden planificar experiencias alternativas, como por ejemplo, juntarse con otros padres con hijos autistas y hacer actividades pensadas para este colectivo, en vez de celebrar todas las comidas y actos de las fiestas.
13. Haz que los regalos sean fáciles de abrir.
Si tu hijo tiene problemas con las habilidades motoras, haz que los regalos no sean difíciles de abrir.
Referencia bibliográfica:
13 Holiday Survival Tips For Your Child With Special Needs. Friendshipcircle.
El 2 de Abril día Mundial de la Concientización sobre el Autismo