La Agencia Europea de Estadística compara los datos registrados entre 2008 y 2016, en donde se percibe un incremento de las posibilidades.

La exclusión social gana terreno en España. La Agencia Europea de Estadística (Eurostat) revela que, entre 2008 y 2016, se ha incrementado el número de ciudadanos en riesgo de caer en exclusión social. Específicamente, se ha pasado de 10.790 personas al borde de la marginación durante 2008 a un total de 12.830 ciudadanos en 2016, lo que representa un aumento de 2.040 personas o, lo que es igual, de un 18, 9 por ciento más.

El estudio precisa que, en 2008, el 23,8 por ciento de la población se encontraba en riesgo de exclusión social, un porcentaje que se ha elevado al 27,9 por ciento ocho años después. En este sentido, se alcanza uno de los índices más altos de Europa, aunque aún está por debajo de países como Bulgaria (40 por ciento), Rumania (38,8 por ciento) Grecia (35,6 por ciento), Lituania (30 por ciento), Italia (28,7 por ciento) y Croacia (28,5 por ciento).

En términos poblacionales, Italia presenta la situación más compleja de Europa para 2016, con un total de 17.470 personas en peligro de marginación. Sin embargo, no es el único, también le siguen Alemania y Reino Unido con un total de 16.040 y 14.360 ciudadanos, respectivamente. En este sentido, la Unión Europea suma una media de 117.470 personas al límite de la exclusión social, lo que equivale al 23,4 por ciento de la población total, así como una caída de tres décimas en comparación con el 23,7 por ciento registrado en 2008.

El informe también permite conocer que el porcentaje de personas más privadas de bienes equivalen al 5,8 por ciento de la población española para 2016, frente al 3,6 por ciento que se registró en 2008. No obstante, es un nivel bajo si se compara con otros países de la Unión Europea como Bulgaria (31,9 por ciento), Rumania (23,8 por ciento), Grecia (22,4 por ciento) y Chipre (13,6 por ciento).