El miércoles 29 de Julio de este año, Santiago Abascal, presidente del partido político VOX, anunció en el Congreso de los Diputados que presentaría una Moción de Censura contra el gobierno presidido por Pedro Sánchez en el mes de septiembre debido a (entre otras razones) la pésima gestión de la crisis sanitaria del Covid-19 y la económica que depende de la primera.
El martes 29 de septiembre, el partido de Santiago Abascal presentó la moción de censura en el registro del Congreso de los Diputados, abalada por los 52 diputados de la tolda verde y con Santiago Abascal propuesto para la presidencia del gobierno.
VOX hizo durante varias semanas un acercamiento a los partidos liberales como el PP y Ciudadanos e incluso invitó a todos aquellos diputados que quisieran, a unirse a esta propuesta y así, entre todos, escoger un candidato de consenso a la presidencia del gobierno.
Desde que se anunció la propuesta, la respuesta por parte de los sectores consultados no ha cambiado, todos han declinado participar en la moción y las razones que más se repiten son: a) Porque los números no dan o b) Porque una moción de censura significa afianzar a Sánchez en el poder.
Para entender el tema de los números, es necesario conocer el Artículo 113, Título V “DE LAS RELACIONES ENTRE EL GOBIERNO Y LAS CORTES GENERALES” de la Constitución Española y que tiene 4 apartados que rezan lo siguiente:
- El Congreso de los Diputados puede exigir la responsabilidad política del gobierno mediante la adopción por mayoría absoluta de la moción de censura.
- La moción de censura deberá ser propuesta al menos por la décima parte de los diputados, y habrá de incluir un candidato a la Presidencia del Gobierno.
- La moción de censura no podrá ser votada hasta que transcurran cinco días desde su presentación. En los dos primeros días de dicho plazo podrán presentarse mociones alternativas.
- Si la moción de censura no fuere aprobada por el Congreso, sus signatarios no podrán presentar otra durante el mismo periodo de sesiones.
El Congreso de los Diputados está compuesto por 350 diputados, el 10 por ciento para solicitar la moción de censura implica 35 diputados y la mayoría absoluta para la aprobación es de al menos 176 diputados, VOX cuenta con 52 diputados, por lo que solicitar la moción de censura no ha sido problema, pero aprobarla, es otra historia.
En la hipotética situación de que tanto el PP como ciudadanos apoyasen la moción de censura, el total de votos sería de 150 (PP 88 diputados y Ciudadanos 10), faltando todavía 26 votos para poder llegar a la mayoría absoluta requerida por la Constitución para aprobar la moción de censura, un resultado como este obviamente daría una percepción de imbatibilidad al gobierno de Pedro Sánchez.
De esto se aferran aquellos que no apoyan la moción de censura, sin embargo, si tomamos en consideración la situación de vulnerabilidad que viven los españoles y la percepción que puedan tener en estos tiempos tan difíciles de los partidos y líderes políticos que hacen oposición al gobierno, se hace evidente que no participar en la moción de censura dejaría una sensación incómoda en el cuerpo.
España tiene un potencial inmenso, pero eso no es suficiente para salir del atolladero en el que estamos metidos, hacen falta acciones, políticas públicas destinadas a estimular la economía y la creación de empleo, a crear incentivos para ayudar a los productores del campo, a la cultura y al turismo, que ha sufrido uno de los peores veranos que se recuerdan, y son precisamente estas acciones y estas políticas públicas las que este gobierno no quiere llevar a cabo.
Todos sabemos que los números no dan y que la moción de censura no va a prosperar, pero en estos momentos, la moción de censura es una oportunidad para manifestar una declaración de intenciones ante la grave situación que vive el país y que todo indica que se que se va a agravar aún más en los próximos meses.
Más allá de cálculos políticos (que por cierto son legítimos para cada partido), se trata de lo que la gente ve en quienes lideran al país, los líderes que deben servir como modelo a la sociedad y el modelo a seguir no puede ser aguantar sin más a que termine la legislatura, si esa es la estrategia, me parece errónea.
La moción de censura es una oportunidad de demostrar a las personas que, a pesar de los obstáculos, la oposición española está unida y en pie contra quienes quieren acabar con nuestro modelo de convivencia, ya luego tienen la tarea de demostrarnos cuál de entre ellos es mejor y por qué, pero en momentos concretos y tan sensibles como los que vivimos, la unidad de criterios y de propósitos es fundamental para el futuro de España.
No somos Venezuela, pero cada día nos parecemos más (II parte)