El 21 de enero 2020, hace un poco más de un año, el Consejo de Ministro del Gobierno de España declaró la Emergencia Climática y Ambiental, y en función de ello se comprometió a desarrollar 30 acciones que fueron fijadas mirando como norte el año 2030; 5 de esas acciones fueron calificadas como prioritarias para ser desarrolladas durante los primeros 100 días de la Declaración.
“La emergencia climática –nos dice el texto aprobado- debe ser abordada ubicando a las personas en el centro, promoviendo respuestas que acompañen a aquellos sectores, colectivos y territorios más directamente amenazados por los impactos físicos o los cambios exigidos por la seguridad climática, con el fin de garantizar una transición justa y no dejar a nadie atrás.”
Luego de un año, algunos dirán que la emergencia climática no ha tenido ningún impacto y otros, tal vez, aún no se han enterado de la medida adoptada por el Gobierno de España en el 2020.
La emergencia climática no solo es una medida que pueden dictar los Países, sino que además, algunas ciudades también han tomado la iniciativa de unirse a ese compromiso formal e institucional de asumir acciones para responder con efectividad a los desafíos que supone el cambio climático.
Argentina, Canadá, Francia, Irlanda, Reino Unido y Portugal, junto a la Unión Europea en el 2019 habían declarado la Emergencia Climática. Por su parte USA, Canadá y Argentina son otros países que también han adoptado tal medida.
Por su parte ciudades como Nueva York, Ottawa, Sidney, Barcelona, Madrid y muchas otras alrededor del mundo también se han unido a ese compromiso que resulta más que evidente es global.
Como ya mencioné, la declaración de Emergencia Climática por parte del Gobierno de España, planteó unas 30 medidas a desarrollar desde el momento de la declaración hasta el año 2030; esas medidas se pueden agrupar en las siguientes áreas:
- Cooperación Internacional.
- Diseño, aprobación y ejecución de planes, leyes y estrategias.
- Coordinación interterritorial
- Diseño de diversas políticas públicas.
Y también se acordó, que de manera prioritaria, 5 acciones se desarrollarían a lo largo de los primeros 100 días contados desde la aprobación de la emergencia climática, ¿se cumplió con el compromiso?.
La Carta Iberoamericana de Participación Ciudadana en la Gestión Pública de 2009 reconoce que todo iberoamericano tiene derecho a hacer seguimiento a la gestión pública, y en ese espíritu, a continuación quiero compartir el avance que he podido validar de esas acciones luego de un año de la declaración.
En primer lugar se planteó remitir al Congreso el proyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética, y en tal sentido, se tiene conocimiento que el mismo fue analizado por la Comisión para la Transición Ecológica del Congreso de Diputados durante este mes de febrero 2021.
La segunda medida, nos decía que era necesario definir la senda de descarbonización a lo largo del país de forma ordenada, que asegure el objetivo de neutralidad climática a más tardar en 2050; en tal sentido, la Estrategia de descarbonización a largo plazo 2050, fue sometida a consulta pública entre el 23 de julio hasta el 30 de septiembre 2020 y fue aprobada por el consejo de ministros el 3 de noviembre 2020.
La tercera medida nos planteaba la presentación del segundo plan de adaptación al Cambio Climático, y sobre el mismo, se tiene conocimiento que fude aprobado por el Consejo de Ministros el 22 de septiembre de 2020.
Una cuarta medida planteaba la creación y activación de la Asamblea de Ciudadanos de Cambio Climático, y es ésta acción la que aún está pendiente. Por cierto, Francia, Reino Unido, Irlanda, Suecia y Escocia, han puesto en marcha sus respectivas asambleas ciudadanas climáticas.
Por último, el quinto compromiso planteó la promoción de convenios de transición justa y medidas de acompañamiento a las industrias. Se conoce que el 17 de abril del 2020 la ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico firmó un acuerdo que consolidó las bases de los Convenios de Transición Justa, junto a representantes de las empresas propietarias de centrales térmicas de carbón en proceso de cierre.
Según el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico en su plataforma web nos dice que la Estrategia para la Transición Justa, junto al anteproyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética y el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima, son los tres pilares del Marco Estratégico de Energía y Clima aprobado por el Gobierno de España en 2019 y su objetivo es optimizar los resultados de la transición ecológica para el empleo y asegurar que las personas y las regiones aprovechen al máximo las oportunidades de esta transición y que nadie se quede atrás.
Según la encuesta de la ONU sobre el cambio climático, el 71% de los españoles apoyan la emergencia climática. ¿Cómo el contenido y alcance de esas medidas fortalecen esa sensibilidad de los españoles?, para ello es fundamental valorar ¿Cómo estos avances logran ser divulgados y valorados por los propios ciudadanos?.
Enfrentar el cambio climático requiere acciones de gobierno, pero complementadas con el comportamiento y compromiso de todos los ciudadanos en función de proteger el Planeta en el que vivimos.