Los nuevos residentes son los protagonistas del acto de asignación, pero sus familiares, parejas y amigos han sido los fieles compañeros en su odisea hasta la anhelada plaza MIR.
Un apoyo incondicional. Así son los familiares, parejas y amigos de los residentes que, cada año, dedican largos meses de preparación a la convocatoria de acceso a la formación sanitaria especializada. Durante el acto de asignación de plazas MIR, son los mismos que indiferentemente del tiempo les esperan a las puertas del Ministerio de Sanidad para poder darles un abrazo.
La madre de Emilio de Dios Berna Rico, quien hará la especialidad de Cardiología en el Hospital Clínico San Carlos, reconoce sentirse muy orgullosa. “Ha sido un proceso de preparación muy intenso. Le he visto muy cansado en algunas etapas, pero ha sido muy bonito ver cómo ha logrado conquistar su meta”. De ahí que confiese que “siento una gran satisfacción por su logro y estoy segura de que será un buen profesional”.
“En esta nueva etapa le recomiendo que la disfrute, ya que es lo que más le gusta y es a lo que se dedica por verdadera vocación, no por dinero u otros intereses”, afirma. Una situación similar a la que ha descrito el abuelo de Adrián Arapiles Muñoz, quien hará la especialidad de Medicina Interna en la Fundación Jiménez Díaz. “Es un profesional muy aplicado. Me ha gustado acompañarle en este proceso y, la verdad, es que estoy muy orgulloso de él”.
El amor de pareja también ayuda a sobrellevar la aventura del MIR. La novia de Fernando Hernández Terciado, que hará Cardiología en el Hospital Universitario de Puerta de Hierro, reconoce que “le vi pasarlo mal”. No obstante, reconoce que el nuevo residente del Sistema Nacional de Salud “es una persona muy fuerte, por lo que fue capaz de seguir a pesar de los momentos malos y, finalmente, ha obtenido su recompensa por su esfuerzo”.
Para esta nueva etapa, la joven le desea a Hernández Terciado que “disfrute al máximo de la residencia y que aprenda al máximo”. Su apoyo es total, ya que “estoy segura de que será un médico espectacular”.
