Paga extra de verano: cuándo se cobra y en qué cantidad
España es uno de los países donde es frecuente contar con 14 pagas anuales en lugar de doce. Estas dos pagas son las conocidas como pagas extraordinarias o, simplemente, pagas extra. El origen de estas pagas lo encontramos en 1944, cuando se ofreció por primera vez una semana de salario al personal de industrias no reglamentadas con ocasión de la Navidad. La medida se volvió permanente al año siguiente. En 1947 llegaría la primera paga extra de verano. La ‘Paga del 18 de julio’, que se creó para que los trabajadores pudiesen celebrar la Fiesta de Exaltación del Trabajo.
Poco a poco, su uso se fue atendiendo y generalizando hasta convertirse en un derecho generalizado que consta en el propio Estatuto de los Trabajadores. Su artículo 31 dispone que «el trabajador tiene derecho a dos gratificaciones extraordinarias al año» cuya cuantía dependerá del convenio en el que esté adscrito. En realidad, este salario no se ‘regala’ y está incluido en la suma anual que hayamos negociado con la empresa. Simplemente son dos salarios que se cobran en momentos distintos.
El Estatuto de los Trabajadores da pistas sobre cuándo se cobra la paga extra de Navidad y cuándo se cobra la paga extra de verano. Así, aclara que el trabajador tiene derecho a dos gratificaciones extraordinarias al año, una de ellas con ocasión de las fiestas de Navidad y «la otra el mes que se fije por convenio colectivo o por acuerdo entre empresario y los representantes legales de los trabajadores».
Por tanto, el día de cobro de la paga extra restante dependerá de lo negociado entre las partes, si bien lo habitual es que coincida con el verano y que se cobre a lo largo del mes de junio. Pocas veces se cobra durante la primera quincena de julio.
Por último, en lo referente a cuánto se cobra de paga extra, tampoco existe una respuesta única, ya que el Estatuto de los Trabajadores nos indica que la cuantía de la paga extra se fijará por convenio colectivo, aunque en ningún caso podrá ser inferior a 30 días o el salario mínimo interprofesional. Normalmente se cobra una nómina idéntica al resto o incluso con algún plus.
Si aún no llevas un año trabajando en la empresa, tu paga extra será proporcional al tiempo trabajado. La fórmula para calcularlo es sencilla: multiplica el valor de la paga por los días trabajados y divide esta cifra entre los días del periodo de paga extra. Al haber dos pagas extra, el tiempo de cómputo es de 180 días.
En cuanto a los pensionistas, la cuantía de la paga extra de verano de los pensionistas equivale a la de una mensualidad ordinaria. Es decir, en el mes de junio aquellos que tienen derecho a pensión cobrarán exactamente el doble de lo que ganan en un mes habitual. Esto ocurre porque la cantidad total que se recibe a lo largo del año se divide en 14 pagas, por lo tanto no significa que ganen más dinero que aquellos que la tienen repartida en 12 mensualidades.
La fecha en la que se obtiene el ingreso de la paga extra es al misma que con el abono de la mensualidad ordinaria. Los pensionistas van a tener el cobro habitual de junio y la paga extraordinaria en torno al día 25 del mes, aunque algunas entidades bancarias lo pueden adelantar. Si tu pensión es de 1.000 euros al mes, este mes de junio tendrás un ingreso de 2.000 euros, ya que ambos pagos se efectúan al mismo tiempo.
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