El sector de las energías renovables está en crecimiento en todo el mundo. Los objetivos de descarbonización para 2030 están acelerando la transición energética y la electrificación, tanto a título individual, como empresarial y administrativo es fundamental. En este contexto, las empresas se encuentran con un déficit de profesionales debidamente formados para hacer frente a las nuevas necesidades de electrificación tanto de la industria como de la sociedad.
Desde el Foro para la Electrificación estiman para España una empleabilidad para los profesionales especializados cercana al 100 %, al menos de aquí a los próximos diez años.
Ingenieros, instaladores y abogados, los perfiles más deseados
Ser experto en energías renovables es sin duda una gran oportunidad laboral y una opción de futuro para los jóvenes que deciden ahora su carrera. Entre los profesionales que las empresas necesitarán contratar a lo largo de esta década destaca el Grado en Ingeniería de Energías Renovables, pero también los titulados en otras ingenierías como Electricidad, Informática, Medioambiente, o Telecomunicaciones.
Del mismo modo, tienen una alta demanda los ciclos formativos relacionados con la instalación y mantenimiento eléctrico y fotovoltaico, Mecatrónica (orientados a armonizar componentes electrónicos y mecánicos a partir de la informática, la mecánica, los sistemas de control y la electrónica), los programadores de Scadas (controlar procesos industriales a distancia), así como los abogados especialistas en aplicación de normativas, cada vez más frecuentes y estrictas.
En el lado contrario de la balanza, apuntan también desde el Foro para la Electrificación, estarían en declive las ingenierías de minas y energía (especializada en petróleo). Pero con una puntualización: “Muchas de las ramas clásicas de la ingeniería no es que hayan quedado obsoletas, es que la forma de impartirlas está anticuada, en concreto notamos que un perfil necesario y muy valioso para nosotros: la ingeniería eléctrica, sigue impartiéndose como hace 30 años. Es necesario que las instituciones académicas se actualicen, no solo para adaptarse a las nuevas tecnologías y demandas de la sociedad, sino también para conseguir que estos grados sean más atractivos para los y las jóvenes”, apuntan desde el Foro para la Electrificación.
“Las energías renovables son sin duda un campo con una gran proyección de futuro y una alta empleabilidad. Desde el sector se buscan ya profesionales formados y comprometidos, pero que además cuenten con soft skills como pensamiento crítico, inteligencia emocional, flexibilidad, creatividad y espíritu colaborativo”, explica Guillermo Amann, portavoz del Foro para la Electrificación.
Empleabilidad en crecimiento en todo el mundo
El número de profesionales que ya trabajan directa o indirectamente en el sector no ha dejado de crecer en los últimos años: según un informe de la Agencia Internacional de las Energías Renovables (IRENA) se esperan más de 139 millones de puestos de trabajo en todo el mundo en el sector de la energía para 2030, de los que 38 millones estarán relacionados con energías renovables, y 74 millones de empleos con la eficiencia energética, vehículos eléctricos y sistemas de hidrógeno.
En total, y siguiendo con las cifras de IRENA estima que el sector podría generar un acumulado de 468.000 empleos a lo largo de toda la década en nuestro país, especialmente en las áreas de energía solar y eólica y sobre todo en las comunidades de Andalucía, Castilla y León y Aragón. El PNIEC (Plan Nacional Integrado de Energía y Clima), por su parte, prevé un aumento neto en el empleo de entre 253.000 y 348.000 personas por año (un aumento del 1,7% en el empleo en 2030) en todo el sector, en concreto, unos 130.000 en el segmento de las renovables y hasta 100.000 en eficiencia energética. Por su parte, las inversiones en redes y electrificación de la economía generarían unos 46.000 empleos al año para 2030.
El sector tecnológico, de ingeniería y de servicios energéticos son, en nuestro país, punta de lanza en la transición energética, y para mantener y avanzar en este ritmo de innovación y adaptación de toda la sociedad y el tejido empresarial, se necesita una base de profesionales especializados. “Estoy convencido de que las energías renovables están ya y van a estar cada vez más presentes en todos los ámbitos de nuestra vida, y como tales, son la columna vertebral de la independencia energética de nuestra sociedad. La sociedad y la economía están viviendo un profundo cambio hacia la descarbonización, y el futuro de continentes como Europa es liderar el desarrollo tecnológico de las energías renovables a escala mundial”, concluye Guillermo Amann, portavoz del Foro de la Electrificación.
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