Fernando Encinar, cofundador y jefe de estudios de Idealista, analiza para el aumento de los precios y de la demanda en el sector de la vivienda. 

Un proceso de natural recuperación. Así valora Fernando Encinar, cofundador y jefe de estudios de Idealista, el incremento de los precios registrado durante el último trimestre en el sector inmobiliario de la vivienda en España. “Tras diez años de oscuridad y malas noticias para el sector inmobiliario, los números positivos han vuelto a instalarse en España”, ha explicado a IberoEconomía. En este sentido, descarta las preocupaciones de una nueva ‘burbuja inmobiliaria’, recordando que “estamos muy lejos de los valores que se alcanzaron en 2007”.

¿Cómo ha evolucionado el mercado inmobiliario en el segundo trimestre del año?

Durante el segundo trimestre el precio de la vivienda de segunda mano en España ha experimentado una subida del 2,7 por ciento. El metro cuadrado ha crecido hasta los 1.554 euros desde los 1.513 euros a los que se cotizaba hace tres meses. En el cómputo interanual la subida es del 1,5 por ciento.

Este incremento en los precios de venta está acompañado por un crecimiento en la concesión de hipotecas y en el número de operaciones cerradas. Aunque, tal y como venimos diciendo más de un año, la normalización se está produciendo a dos velocidades, hay que destacar que las distancias se van acortando y son cada vez más los municipios españoles que se acercan a su punto de equilibrio.

 ¿Cuáles son las regiones que han registrado una mayor recuperación del mercado?

El informe del segundo trimestre de 2017 mantiene las diferentes velocidades a las que evoluciona el sector inmobiliario en España: con crecimientos generalizados en los grandes mercados y con ajustes en núcleos de población sin interés por parte de la demanda. Si atendemos a las comunidades autónomas, sólo Navarra, Extremadura y Galicia han visto cómo su precio caía, en Cantabria no se han movido y en las 13 comunidades restantes los precios han aumentado. 37 provincias y 28 capitales consiguen cerrar el trimestre en positivo.

La ciudad de Barcelona registra una subida del 3,2 por ciento, hasta dejar el precio del metro cuadrado en 4.253 euros. Si atendemos al dato interanual, los precio en la ciudad condal han crecido un 20,4 por ciento en los últimos 12 meses. Aun así, los precios siguen un 10,1 por ciento más bajos que hace 10 años, cuando explotó la burbuja inmobiliaria.

Madrid termina el segundo cuarto del año con una subida en el precio de la vivienda usada del 4,4 por ciento, lo que sitúa el precio del metro cuadrado en la capital en 3.047 euros. En el interanual, el incremento es del 6,3 por ciento. El descenso acumulado en la última década es del 24,5 por ciento.

 ¿Cuáles son las características más comunes que se buscan en un inmueble para su compra?

El mercado inmobiliario español es tan amplio y tan diverso que es imposible establecer un patrón como tal. De todas maneras, la práctica totalidad de las personas que están buscando casa en España tienen tres “patas” en su proceso: la ubicación, el tamaño de la vivienda y el precio. Con suerte solo podrán elegir dos, ya que si elige donde vive y el tamaño de la vivienda, el precio vendrá dado; pero si elige el tamaño y el precio, los puntos en los que podrá vivir son muy limitados.

¿Y para su alquiler?

El mercado del alquiler ha adquirido un enorme dinamismo en los últimos años en España y la demanda supera ampliamente a la oferta en las grandes ciudades, que son los grandes polos de atracción de alquileres.

¿Qué perspectivas existen para el mercado inmobiliario para el cierre de 2017?
Las perspectivas del sector inmobiliario son positivas tras una década de crisis. El optimismo se ha vuelto a asentar en el sector respaldado por los incrementos en el número de compraventas, hipotecas concedidas y el ligero repunte que experimentan los precios.

¿Existe el riesgo de una nueva burbuja inmobiliaria?

Tras diez años de oscuridad y malas noticias para el sector inmobiliario, los números positivos han vuelto a instalarse en España. Cada vez se venden más casas, se conceden más hipotecas y los precios suben, aunque en todos estos aspectos estamos muy lejos de los valores que se alcanzaron durante la burbuja que explotó en 2007. El mercado español está en un proceso de normalización hacia un mercado saneado, no sobrecalentándose.