El ministro Cristóbal Montoro reitera que el comercio online de segunda mano está sujeto “a las mismas normas tributarias que los demás”.

Wallapop, Vibbo o eBay obligadas a pagar impuestos. El ministro de Hacienda y Función Pública, Cristóbal Montoro, ha reiterado que el comercio online de segunda mano está sujeto “a las mismas normas tributarias que los demás”, ya que su tributación “no puede ser diferentes de las transacciones comerciales normales”.

Montoro responde así a la información de Expansión que afirma que Hacienda está pidiendo las bases de datos a las plataformas de comercio online para investigar estas transacciones, después de que Tributos estableciera en una consulta vinculante de agosto que estaban sujetas al Impuesto de Transmisiones Patrimoniales (ITP) y que deberían tributar al 4 por ciento. El ministro dice que no hay novedades y que ya era así antes.

“No hay ninguna novedad tributaria, no es que cambie el impuesto, estamos clarificando que el comercio online también se sujeta a las mismas normas tributarias que los demás”, aclaró. Preguntado sobre la forma de calcular lo que hay que tributar por la venta de productos de segunda mano, Montoro ha indicado que “lo tiene que realizar quien está realizando la venta”, de forma que “si tiene una plusvalía, le corresponde a quien hace esa transacción”.

La compraventa de productos de segunda mano a través de plataformas como Wallapop, Vibbo, eBay, Chicfy o Amazon está exentas de IVA, pero quedan gravada por el ITP y, en caso de que haya plusvalía, tienen que computar en el IRPF. La plusvalía no suele darse en estas ventas, ya que es más usual en objetos de arte o coleccionismo.

En este sentido, ha explicado que una cosa es que se haga la transmisión, lo que tiene un gravamen, y otra que personas que hacen transmisión obtenga una ganancia o registren una pérdida respecto del valor anterior. “Si haces una transacción comercial, estas se gravan”, ha puntualizado.

En el Plan de Control Tributario de este año, la Agencia Tributaria ya advirtió de que la economía digital es a partir de ahora otra de las prioridades de Hacienda, y especialmente los nuevos medios de pago en las operaciones por internet, como criptomonedas, plataformas medidoras de pago o pagos desde dispositivos móviles, ya que pueden facilitar la opacidad de las operaciones.