El Consejo de Ministros ha aprobado este martes el primer tramo de 5.000 millones de euros de la nueva línea de avales del Instituto de Crédito Oficial (ICO) para que empresas y autónomos puedan hacer frente al impacto económico causado por la guerra en Ucrania tras la invasión rusa.
Autónomos y empresas podrán solicitarlos hasta el 1 de diciembre de 2022 y, de partida, todas las compañías tendrán derecho a una carencia inicial de 12 meses.
Así lo ha anunciado la portavoz del Gobierno y ministra de Política Territorial, Isabel Rodríguez, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, en la que ha recordado que esta medida forma parte del plan de respuesta a la guerra aprobado por el Ejecutivo y convalidado en el Congreso de los Diputados.
Todas las empresas tendrán una carencia inicial de 12 meses
El Gobierno ha desplegado este primer tramo de la nueva línea de avales, que cuenta con un importe máximo de 10.000 millones, para garantizar el acceso a la liquidez de las empresas afectadas por el incremento de los costes energéticos o de las materias primas derivados de la guerra en Ucrania.
El aval garantizará hasta el 80% de los nuevos préstamos de operaciones solicitadas con importe máximo avalado de hasta 400.000 euros con carácter general, o 35.000 euros para empresas del sector primario, acuicultura o pesca, en una o varias operaciones de préstamo. En estos casos, el aval emitido tendrá una vigencia igual al plazo del préstamo concedido, con un plazo máximo de 10 años.
En el caso de operaciones con un volumen superior a 400.000 euros, los avales podrán alcanzar el 80% del crédito para pymes y autónomos y el 70% para el resto de empresas, pero el préstamo no podrá superar el 15% de la facturación anual del negocio ni el 50% del coste anual de la energía. El plazo máximo será de ocho años.
Todas las empresas, indistintamente de cuál sea la garantía que soliciten, tendrán derecho a una carencia inicial de 12 meses, según ha explicado la portavoz del Gobierno. Además, las entidades financieras deberán mantener abiertas las líneas de circulante de sus clientes hasta el 31 de diciembre de 2022.
Autónomos y empresas podrán solicitarlos hasta el 1 de diciembre de 2022, siempre que no se encuentren en situación de morosidad ni en procedimiento concursal a la fecha de firma de la operación, ni estén sujetos a sanciones por parte de la Unión Europea, ni tengan en el momento de solicitud del aval ningún proceso de ejecución de avales gestionados por el ICO.
Asimismo, las entidades financieras deberán aplicar los mejores usos y prácticas bancarias en beneficio de sus clientes y no podrán condicionar la aprobación de los préstamos a la contratación por parte del cliente de ningún otro servicio o producto.
Casi 750.000 empresas financiadas con avales ICO-COVID
Durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Isabel Rodríguez ha recordado que no es la primera vez que el Gobierno pone en marcha medidas excepcionales de estas características y ha hecho referencia a las líneas de avales ICO-COVID.
Con esta línea se han financiado casi 750.000 empresas, en su mayor parte pymes y autónomos, y se llegaron a movilizar 140.000 millones de euros para paliar el impacto de la crisis, sobre todo en los sectores más afectados, como el transporte, el consumo, el comercio o el textil. Territorialmente, han sido muy demandadas en la Comunidad de Madrid, Andalucía y Cataluña.
«El buen funcionamiento de esta línea es la que ha provocado que, ante otra crisis, el Gobierno haya decidido estar de nuevo al lado de las empresas y los autónomos para sostener sus economías», ha resaltado la portavoz.