La nación iberoamericana mantiene el buen ritmo en su evolución económica, frente a los frenos que se han generado en las finanzas de Estados Unidos y Reino Unido.
España lidera el crecimiento de las economías desarrolladas. El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha reconocido que el país ibérico volverá a ser la economía desarrollada con mayor ritmo de crecimiento por segundo año consecutivo. De ahí que confirme los pronósticos desvelados la semana pasada durante la visita a Madrid de sus técnicos, que revisaron al alza sus expectativas de expansión, hasta el 3,1 por ciento en 2017 y el 2,4 por ciento en 2018.
La información, comprendida en el informe ‘Perspectivas Económicas Mundiales’, se muestra un poco menos optimista con respecto a Estados Unidos y Reino Unido, donde se prevé que exista un crecimiento inferior al estimado, por lo que se han presentado recortes en las proyecciones publicadas por el Fondo Monetario Internacional. «En el caso de Estados Unidos, las proyecciones de crecimiento son más bajas que en abril, principalmente porque se presume que la política fiscal será menos expansiva de lo previsto», afirma la institución.
Asimismo, la institución internacional ha recortado su previsión de crecimiento para Reino Unido en 2017, cuando la economía británica se expandirá a un ritmo del 1,7 por ciento, tres décimas menos de los esperado el pasado mes de abril, mientras mantiene en el 1,5 por ciento su pronóstico para 2018, «ya que la actividad defraudó las expectativas en el primer trimestre».
Como consecuencia de la mejoría prevista en España, así como en las economías de Alemania, Francia e Italia, el FMI ha revisado al alza su pronóstico de crecimiento para la zona euro, hasta el 1,9 por ciento en 2017 y el 1,7 por ciento en 2018, lo que representa una mejora de dos y una décima respectivamente respecto a los pronósticos de abril.
De este modo, a nivel global el FMI ha confirmado sus pronósticos de crecimiento de abril, con una expansión del PIB mundial del 3,5 por ciento este año y el 3,6 por ciento en 2018, aunque la revisión a la baja de las previsiones para Estados Unidos conlleva un empeoramiento de las expectativas para 2018 de las economías avanzadas, que crecerán un 1,9 por ciento en vez del 2 por ciento previsto anteriormente, mientras se confirma la proyección de una expansión del 2 por ciento en 2017.