A través del proyecto ‘CAMINOSsinplástico’, iniciativa que pretende reducir el uso del plástico en la sociedad.
Cinco ingenieros de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería (ETSI) de Caminos de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) han puesto en marcha el proyecto ‘CAMINOSsinplástico’, con el que pretenden reducir el uso del plástico en la sociedad.
Para ello, Clara Zamorano, Ana Berrocal y Mar García viajarán en agosto hasta Costa Rica, el país mayor biodiversidad del planeta, junto a dos compañeros para tratar de acabar con los focos de vertido de plástico que contaminan sus costas, en el Parque Nacional de Corcovado.
«Vamos a desarrollar un programa de sensibilización ambiental para el desarrollo de un turismo responsable, además de evitar la llegada de plásticos a las costas del Parque Nacional y estudiar la afección de la contaminación plástica a la vida marina de la zona», explican las investigadoras.
Este proyecto de cooperación internacional nace a partir de la iniciativa ‘Cero Oferta-Cero Demanda’ iniciada por este grupo de ingenieros de la UCM para sensibilizar al ámbito universitario del consumo irracional de plásticos de un solo uso.
«Comenzamos este proyecto en octubre del año pasado y ya somos un equipo de 20 personas con muchas ganas de cambiar nuestro entorno», afirman las fundadoras de ‘CAMINOSsinplástico’.
Entre sus objetivos, se encuentra la de identificar la cantidad de plásticos que llegan a la costa del Parque Nacional y su distribución temporal a través de un estudio de corrientes marinas y teledetección, de modo que se pueda localizar su origen y evitar su llegada al parque.
Igualmente, pretenden proteger y regenerar los corales del parque afectados por el cambio climático, así como conocer la afección de la contaminación plástica a la vida marina en las inmediaciones del parque, y realizar un programa de sensibilización ambiental para el desarrollo de un turismo responsable.
Para poder emprender su viaje, las tres ingenieras han iniciado una campaña de ‘crowdfunding’ en GoFundMe para recaudar los 9.000 euros con los que pagarán el alquiler del transporte necesario para desarrollar su trabajo de campo en el Parque Nacional de Corcovado y el coste de los billetes de avión a Costa Rica.