Madrid seduce a los inversores inmobiliarios internacionales. Un estudio de CBRE, donde se han entrevistado a 2.000 inversores internacionales, revela que la capital española es la tercera ciudad más atractiva de Europa, Oriente Medio y África para las inversiones inmobiliarias, solo siendo superada por Londres (17 por ciento) y Berlín (15 por ciento).
“Madrid (8,4 por ciento) es una ciudad atractiva para los inversores internacionales debido a varios factores. Los precios aún están por debajo del de otros mercados y en los últimos años se han iniciado proyectos de rehabilitación y desarrollo interesantes. Asimismo, hay previsión de crecimiento de rentas. Esto hizo que en 2016 la inversión en la capital superase los 4.000 millones de euros en esta ciudad”, apunta Paloma Relinque, directora de inversión CBRE España.
El ‘top cinco’ queda completado por Ámsterdam y Paris, que no pierde el quinto puesto del ranking a pesar de los agresivos precios de sus activos y el riesgo político pre-electoral. Como novedad en 2017, cabe destacar que ciudades como Hamburgo o Milán no aparecen entre las diez primeras, debido a una creciente preocupación por parte de los inversores por los precios que han alcanzado los activos en los mercados más consolidados de Europa, tras años de subidas.
En lo referente a los países más atractivos, España se sitúa en sexto lugar, manteniendo así su puesto en el top 10 de todos los países de Europa, Oriente Medio y África. En este sentido, Alemania es el mercado preferido por el 22% de los encuestados para invertir en 2017. Le sigue Reino Unido (20 por ciento), Europa del Este (10 por ciento), los Países Nórdicos (10 por ciento) y Holanda (9 por ciento ).
Sectores de inversión
A la pregunta de en qué sectores tienen previsto invertir, el mercado de oficinas es el más mencionado, por un 34,7 por ciento de los inversores. Le sigue el sector industrial-logístico, elegido por el 25,9 por ciento. Sin embargo, una de las conclusiones más destacables es el creciente apetito por los activos alternativos, en el que ya invierten 7 de cada 10 inversores inmobiliarios. En concreto, la deuda inmobiliaria es la que mayor interés despierta para un 31 por ciento, seguida del ocio y el entretenimiento (27 por ciento) –que es el que más ha crecido en comparación con el año pasado- y las residencias de estudiantes (25 por ciento).
Por otro lado, el informe muestra las principales preocupaciones de los inversores en 2017. De ellas, la más mencionada es el riesgo de que se produzca un incremento de los tipos de interés más rápido de lo esperado, señalada por un cuarto de los inversores encuestados. Es destacable que, a pesar de las numerosas elecciones que se avecinan en Europa, con posibles implicaciones para el sector, los inversores dan mayor importancia al clima económico que a los asuntos geopolíticos. La tercera preocupación es el calentamiento de los precios y el riesgo de una posible burbuja.
Por segundo año, además, se ha analizado la motivación que incita a la inversión inmobiliaria. En 2017, la principal razón es que la rentabilidad esperada a la hora de invertir en el sector inmobiliario es superior a la de otro tipo de activos como los bonos soberanos. La estabilidad del mercado en la región y la alta liquidez son también dos de los principales impulsores de la inversión inmobiliaria en 2017.