Paolo Gentiloni y Thierry Breton, comisarios del Ejecutivo comunitario, buscan impulsar el empleo de los eurobonos, también llamados «coronabonos»
Los comisarios de Economía y Mercado Interior, Paolo Gentiloni y Thierry Breton, respectivamente, han propuesto la creación de un fondo europeo que impulse la recuperación económica de la UE tras la pandemia de Covid-19 y que pueda financiarse a través de la emisión de deuda a largo plazo, eurobonos, un extremo que rechazan de plano países como Países Bajos o Alemania.
En una tribuna publicada en varios medios europeos, como ‘El Mundo’ en España, ‘Le Monde’ en Francia y ‘FAZ’ en Alemania, el italiano y el francés apuestan por la emisión de eurobonos y, de esta forma se desmarcan de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, para quien la herramienta principal de la recuperación debe ser el presupuesto de la UE.
«Ningún Estado europeo, ya sea del norte o del sur, tiene los medios para hacer frente a tal choque por sí solo sin recurrir a emitir deuda adicional, ninguno en absoluto», enfatizan Gentiloni y Breton, quienes piensan que «será necesario un cuarto pilar de financiación europea».
Esta pilar que proponen tendría la forma de un Fondo Europeo de Recuperación Económica «cuya vocación explícita permitiría la emisión de bonos a largo plazo», en un planteamiento muy similar al que ha lanzado el Gobierno francés o grupos del Parlamento Europeo como los socialdemócratas o los ecologistas.
A juicio de los responsables de Economía y Mercado Interior del Ejecutivo comunitario, las medidas adoptadas hasta ahora han sido «esenciales» para garantizar la supervivencia financiera, pero ahora «es necesario ir más lejos para poner fin a la crisis, proteger a las empresas, a los empleados y relanzar pronto país por país la base industrial y el mercado único».
Además, Gentiloni y Breton apuntan que se podrían asignar recursos financieros a este instrumento y diseñar un sistema de gobernanza que evitara «cualquier riesgo moral» que siempre aducen los países del norte en sus críticas a estas herramientas.
«El tiempo se nos está acabando. Las circunstancias exigen creatividad. Europa ha aprendido de crisis anteriores y frente a la que estamos sufriendo va a estar a la altura de la llamada de la Historia», finalizan la tribuna los dos comisarios.
EVITAR MAYORES DIVERGENCIAS EN LA EUROZONA
En un acto organizado por el diario británico ‘Financial Times’ y el ‘think tank’ Bruegel este lunes, Gentiloni ha enfatizado también que el objetivo principal de cualquier medida debe ser evitar que la crisis actual «aumente las divergencias entre las economías de la eurozona». «Esto sería muy peligroso», ha advertido.
El exprimer ministro italiano ha defendido que es necesario un «fuerte esfuerzo fiscal» y, para conseguirlo, es importante ir construyendo el consenso para avanzar en una «herramienta común» como la que él plantea con su colega Breton.
Gentiloni ha recordado que el famoso ‘plan Marshall’ fue lanzado dos años después de que finalizara la Segunda Guerra Mundial. Pero la UE necesita ahora que iniciativas para relanzar la economía y atajar las divergencias «en las próximas semanas y meses».
En su opinión, utilizar el fondo europeo de rescates (MEDE) en esta crisis exige un cambio en las condiciones que se imponen a los países que solicitan sus líneas de crédito para que no estén vinculadas a futuras reformas macroeconómicas, como sucedió durante la crisis financiera de 2008 y los años posteriores.
«No podemos decirle ahora a un país afectado por esta terrible crisis que tiene que tener un programa de vigilancia, que tienes que hacer esto o lo otro con tu sistema de pensiones. Esto es, obviamente, totalmente imposible desde el punto de vista político (…) Estamos intentando usar esta herramienta de un modo completamente diferente al modo en que fue usada en la crisis financiera», ha remarcado.
Asimismo, Gentiloni ha pedido enterrar los reproches entre capitales sobre lo que han hecho bien o mal durante los últimos diez años. «Necesitamos un debate que vaya hacia el futuro y no lamentar nuestras opiniones diferentes de los últimos diez años. Desde mi punto de vista, esta discusión es negativa», ha zanjado.
La UE espera tener una respuesta fiscal conjunta para hacer frente al coronavirus