La Universidad Católica Argentina ha realizado un estudio para medir el impacto de la economía en las principales ciudades del país.

Un informe del Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina (UCA), el 31,3 por ciento de la población urbana argentina, lo que equivale a 12.676.500 personas, se encontraban afectadas por una situación de pobreza multidimensional para finales de 2018, lo que supone un 4,7 por ciento más que en el último año.

De acuerdo a estos datos, hay 1.903.500 nuevos pobres viviendo en las zonas urbanas de Argentina. Este documento refleja «un agravamiento de la pobreza estructural y una ampliación de la brecha de desigualdad», según el director de la UCA, Agustín Salvia, informó la agencia ‘Sputnik’.

La pobreza multidimensional, que toma como indicadores la vivienda, alimentación, educación, salud, trabajo y servicios básicos, empeoró con respecto a finales de 2017, cuando esta situación afectaba al 26,6 por ciento de la población y arrojó en 2018 el peor dato desde que comenzara la serie estadística de la UCA, en 2010.

Esto «significa estar sometido a privaciones y exclusiones sociales que no se limitan al nivel de ingreso», aclaró el responsable del informe «Enfoque de pobreza multidimensional basado en derechos».

En cuanto a la pobreza estructural, que estudia la carencia de dos o tres indicadores fundamentales, se encuentra el 18,6 por ciento de los argentinos que viven en las ciudades, un 2 por ciento más que en el año anterior.

Para finales de 2018, el 7,9 por ciento de la población padecía de la falta de alimentación severa, cuando un año antes era del 6,2 por ciento. Por otro lado, el informe de la UCA reflejó también un deterioro en el nivel de empleo registrado e inseguridad social, al afectar del 33,5 por ciento de la población en 2017, con respecto al 34,3 por ciento el año pasado.

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