El ratio del número de aspirantes por plaza ofertada ha venido creciendo desde 2009, una tendencia que se ha invertido en la actual convocatoria de acceso al PIR.
Los aspirantes vivirán un examen PIR atípico. La prueba de acceso a la residencia tiene un mayor número de plazas y, por tercera vez en la última década, una menor tasa de competitividad. Al menos, así lo indican los datos del Ministerio de Sanidad, donde se refleja un ligero decrecimiento en el ratio de aspirantes por plaza ofertada durante la actual convocatoria del Sistema Nacional de Salud (SNS).
Si la convocatoria anterior tenían que disputar una vacante un total de 31,2 candidatos, para el examen que se celebrará el próximo 2 de febrero la tasa será de 28,8 aspirantes. Es decir, la tasa más baja de los últimos seis años, quedando por debajo del ratio que se registró durante 2018 (31,2 aspirante por plaza), 2017 (32,1), 2016 (31,2), 2015 (32,3), 2014 (30,5) y 2013 (30,1).
La caída en el ratio de aspirante por plaza PIR ofertada no alcanza, sin embargo, a los niveles registrados entre el año 2000 y 2012. Un período donde la tasa osciló entre los 18 y 26 candidatos por vacante. Unas cifras que, hasta esa fecha, sólo se habían vivido en las convocatorias de 1997 y 1998, dejando atrás la recordada convocatoria de 1994, cuando el ratio fue de 67,3 aspirantes por plaza.