El Gobierno de Liz Truss ha anunciado este viernes una histórica bajada de impuestos en Reino Unido para afrontar el aumento en el coste de la vida y en la energía. La medida, la mayor acometida en los últimos 50 años, se enmarca dentro de un ambicioso «plan de crecimiento» y se pondrá en marcha sobre la renta a partir de abril de 2023.
El encargado de desgranar ante la Cámara de los Comunes (baja) el plan ha sido el ministro de Economía, Kwasi Kwarteng, quien ha afirmado que se rebajará «el tipo básico del impuesto sobre la renta al 19%» un año antes de lo previsto. En apenas unos meses, esto supondrá un recorte fiscal «para más de 31 millones de personas» y «se abolirá la tasa más elevada del 45%», ha asegurado.
Se prevé asimismo una rebaja de la tasa sobre la compra de viviendas (el denominado stamp duty) en Inglaterra e Irlanda del Norte, elevando a 250.000 libras (286.000 euros) el precio de la vivienda a partir del cual se ha de pagar ese tributo. En el caso de las personas que adquieran propiedad por primera vez, el umbral se elevará de 300.000 a 425.000 libras (de 343.000 a 487.000 euros), ha precisado.
En total, el coste total de los recortes fiscales asciende a casi 45.000 millones de libras (51.042 millones de euros) para 2027. Todos estos anuncios significan que el endeudamiento del Gobierno aumentará en 72.000 millones de libras (81.668 millones de euros).
Cancelados los límites al impuesto de sociedades y a los bonus de banqueros
En esta línea, el nuevo canciller del Exchequer ha informado igualmente que se cancelará el incremento previsto para 2023 del impuesto de sociedades y se erradicará el actual límite a los bonus que perciben los banqueros, esta última es una medida que ha generado controversia.
Hasta ahora, según las actuales reglas acordadas tras la crisis financiera en el marco de la Unión Europea, la bonificación que percibe un banquero no puede superar el doble de su salario anual, a menos que haya un acuerdo entre accionistas. «Necesitamos bancos globales para crear empleo aquí, invertir aquí, y pagar impuestos en Londres, no en París, no en Fráncfort, no en Nueva York», ha defendido.
En cuanto al planeado aumento para 2023 de la contribución a la seguridad social -de 1,25 puntos porcentuales– introducido por el anterior titular de Economía, Rishi Sunak, este se revertirá a partir del 6 de noviembre. Además, los incrementos programados en los impuestos sobre la cerveza, sidra, vino y bebidas destiladas también se eliminarán.
Nuevas inversiones y plan energético: límite a la luz y al gas
Además de las medidas fiscales, el ministro ha anunciado que liberalizarán la planificación para ayudar a acelerar la inversión y se generarán nuevas zonas con las que atraer negocios en casi 40 áreas del país, que se beneficiarán de alivios fiscales en la seguridad social y en las tasas a las empresas.
Por otro lado, ha expuesto los detalles del ya anunciado paquete de apoyo energético para hogares y negocios y ha revelado que este costará 60.000 millones de libras (67.848 millones de euros) durante los próximos seis meses.
A fin de erradicar «el alto coste de la energía, motivado por la invasión de Vladímir Putin a Ucrania, que ha disparado la inflación», Kwarteng ha añadido que se pondrá tope al precio por unidad que los consumidores pagarán por electricidad y gas, limitando la factura promedio de las familias a 2.500 libras (2.834 euros) anuales.
La libra se desploma tras los anuncios
Tras los anuncios del Gobierno británico, el valor de la libra esterlina respecto al dólar estadounidense se ha desplomado este viernes hasta un mínimo no visto desde 1985.
Concretamente, la divisa del Reino Unido ha perdido un 1,97 % frente al dólar, hasta 1,1041 dólares; un 1,11 % frente al euro, hasta 1,1320 euros; y un 1,54 % respecto al yen, hasta 157,7900 yenes.
Mientras tanto, el rendimiento de la deuda británica a 10 años ha subido en 0,27 puntos porcentuales, hasta el 3,77 %.