Las diferencias en la remuneración laboral tienen sus puntos más bajos en Rumania y en Italia, según afirman los últimos datos de la Agencia Europea de Estadísticas (Eurostat).
Europa no se libra de la brecha salarial de género. Los datos de la Agencia Europea de Estadísticas (Eurostat) revelan que la diferencia es del 16 por ciento de media dentro de la Unión Europea. Es decir, al cierre de 2016, las mujeres europeas ganaban 84 céntimos por cada euro por hora que ganaban los hombres.
Los países más equitativos son Rumanía e Italia, donde la brecha oscilaba en un 5 por ciento, una cifra considerablemente inferior a la que, al contrario, registran países como Estonia (25 por ciento) o la República Checa y Alemania (casi el 22 por ciento). En comparación con 2011, hay que decir que la brecha salarial de género se ha reducido en la mayoría de los Estados miembros de la Unión Europea.
Las reducciones más significativas registradas entre 2011 y 2016 se produjeron en Rumanía (-4,4 puntos porcentuales), Hungría (-4,0 puntos porcentuales), España yAustria (-3,4 puntos porcentuales), Bélgica (-3,3 puntos porcentuales) y los Países Bajos (-3,0 puntos porcentuales). Sin embargo, no todos los países han remado en esta dirección, según indica el informe de Eurostat.
Por el contrario, la brecha salarial de género ha crecido, durante el mismo período, en diez Estados miembros, siendo las subidas más significativas las de Portugal (4,6 puntos porcentuales) y Eslovenia (4,5 puntos porcentuales). Sin embargo, a nivel de la Unión Europea, la brecha salarial de género ha disminuido ligeramente (0,6 puntos porcentuales) y ha pasado del 16,8 por ciento del 2011 al 16,2 por ciento de 2016.
En este sentido, destacan los países que han logrado mantener las diferencias por debajo del 10 por ciento, siendo el caso de: Rumanía (5,2 por ciento), Italia (5,3 por ciento), Luxemburgo (5,5 por ciento), Bélgica (6,1 por ciento), Polonia (7,2 por ciento), Eslovenia (7,8 por ciento) y Croacia (8,7 por ciento, datos de 2014).