A través de un importe de 44.000 millones de dólares durante 2016, según indican los datos de la OCDE.
Los fondos de pensiones españoles se consolidaron como los segundos inversores más importantes en la Unión Europea con un importe de 44.000 millones de dólares (37.348 millones de euros), según un estudio publicado este viernes por la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) bajo el nombre ‘Los fondos de pensiones en el foco’ con datos de 2016.
El monto total de inversiones extranjeras por parte de fondos de pensiones de un conjunto de 25 países que desglosan los datos por áreas geográficas de la OCDE y no-OCDE ascendió a 767.000 millones de dólares (651.000 millones de euros) el año pasado, mientras que la mayor parte se dirigió hacia la Unión Europea y a América del Norte.
En concreto, la OCDE apunta que el 52 por ciento del total o 402.000 millones de dólares (341.000 millones de euros) de las inversiones a través de fondos de pensiones fue a parar a la UE. En este sentido, los fondos de los Países Bajos se situaron como los principales inversores en el Viejo Continente, cuyo importe ascendió a 298.000 millones de dólares (253.000 millones de euros). A los neerlandeses le siguieron los fondos españoles como los más importantes en la UE.
De su lado, América del Norte fue la segunda área geográfica más popular para la inversión extranjera por los fondos de pensiones de la muestra analizada por la OCDE. De la suma de 767.000 millones de dólares (651.000 millones de euros), 230.000 millones de dólares (195.000 millones de euros) se colocaron en este subcontinente americano.
Por otro lado, el informe muestra los activos más comunes en los que invierten los fondos de pensiones de cada país. En España, el 51 por ciento invierte en bonos y obligaciones, el 18 por ciento en esquemas de inversión colectiva (CIS, por sus siglas en inglés), el 12 por ciento en depósitos y el 11 por ciento en acciones.
En general, la rentabilidad de las inversiones depende de la habilidad de los administradores de los fondos, del activo que se elija y del periodo de la inversión, señala la OCDE. No obstante, el instrumento preferido normalmente son los bonos y obligaciones, que representaron el 75 por ciento del total de las inversiones en los países de la OCDE y no-OCDE en 2016.
La rentabilidad de los fondos de pensiones fue del 2,4 por ciento en el conjunto de la OCDE, si bien se registraron diferencias significativas, desde el 8,3 por ciento en Polonia o el 8,1 por ciento en Irlanda, hasta las lecturas negativas de Islandia (-0,3 por ciento) o República Checa (-1,2 por ciento). Junto a Polonia e Irlanda, obtuvieron las mejores remuneraciones entre diciembre de 2015 y de 2016 los fondos en Holanda (7,2 por ciento), Eslovenia (6,9 por ciento), Dinamarca (5,9 por ciento), Suecia (4,9 por ciento), Hungría (4,8 por ciento), Grecia (4,3 por ciento), Finlandia (4 por ciento) y Canadá (4 por ciento).
Las rentabilidades más bajas, al contrario, se constataron en Australia (1,9 por ciento), Chile (1,5 por ciento), Estonia (1 por ciento), España (1 por ciento), Portugal (0,6 por ciento) y Letonia (0 por ciento).