El Gobierno reconoce la falta de la materia prima por lo que reducirá el número de páginas y la frecuencia en la publicación de sus principales cabeceras.

El Gobierno de Cuba ha anunciado una reducción en el número de páginas y la frecuencia de las principales cabeceras de la prensa oficial del país, incluido el diario ‘Granma’, debido a la escasez de papel.

«Debido a dificultades con la disponibilidad de papel gaceta en el país, las ediciones del periódico ‘Granma’ de los miércoles y viernes, así como de los semanarios ‘Granma Internacional’, ‘Trabajadores’, ‘Orbe’ y ‘Opciones’, se reducirán de 16 a ocho páginas, a partir del viernes 5 de abril», ha señalado la nota publicada en el propio diario oficial.

«‘Juventud Rebelde’ circulará los domingos con su paginado habitual y dejará de circular los sábados. Otras publicaciones seriadas que se imprimen en papel gaceta verán afectada igualmente su circulación», ha agregado.

La medida es similar a la adoptada en los noventa durante el llamado Periodo Especial, como se llama a la crisis económica en la isla tras la caída de la Unión Soviética, en esa época el mayor comercial de la isla,

El recorte en la prensa oficial se añade a un notorio desabastecimiento de productos de primera necesidad para los cubanos que van desde aceite, huevos, harina de trigo y medicamentos hasta artículos de higiene, que conllevan a largas filas en la red de mercados locales cuando son distribuidos, según ha recogido la agencia de noticias Reuters.

El Gobierno comunista ha admitido públicamente el desabastecimiento, argumentando que «se incumplieron producciones importantes para la economía». Cuba importa entre el 60 y 70 por ciento de los alimentos que consume por un valor de unos 2.000 millones de dólares.

Washington aplica a La Habana un embargo comercial de hace casi seis décadas y amenaza con recrudecer las sanciones en momentos en que la isla se ha visto afectada por el colapso económico de su socio Venezuela, que comenzó a enviar combustible hace alrededor de 19 años a precios preferenciales y dinero en efectivo a cambio de servicios médicos.