La super estrella de la música Taylor Swift ha perdido los derechos sobre su discografía.
Taylor Swift ha perdido el dominio sobre la música que ha grabado hasta su último disco, luego de que su antiguo mánager comprara los derechos de catálogo musical.
Luego de seis años cargados de éxito, Taylow Swift está viviendo lo que parece ser el peor momento y el primer declive de su carrera profesional, puesto que habría perdido los derechos sobre su catálogo musical, desde sus inicios hasta el último álbum, “Reputation”.
Este fin de semana el productor Scooter Braun, que fue su mánager y al que acusa de haberla acosado y haberle hecho bullying, ha comprado los derechos de su catálogo musical por 300 millones de dólares (unos 265 millones de euros), y junto con esto, la compañía y anterior sello disquero de Taylor, Big Machine.
“Este es Scooter Braun, acosándome en las redes sociales cuando estaba en mi momento más bajo. Está a punto de quedarse con toda la música que he hecho”. Así encabeza Swift un comunicado que ha colgado en la red Tumblr.
Con el negocio en cuestión, Taylor pierde los derechos sobre su músico, puesto que la compañía con la que trabajó durante casi toda su carrera, no le permitió conservar la autoría. “Durante años he pedido, he rogado, una oportunidad para poseer mi propio trabajo”, exclamó Swift. “He tenido que tomar la horrible decisión de elegir y dejar atrás mi pasado. La música que escribí en el suelo de mi habitación y los vídeos con los que soñe, que pagué de mi dinero, del que gané tocando el bares, después en clubes, después en salas, después en estadios”, agregó.
“Datos curiosos de hoy: he sabido que Scooter Braun ha comprado todos mis discos y que se ha dado a conocer al mundo. Solo puedo pensar en el acoso y la manipulación que he sufrido de sus manos durante años”, relata Swift. Asimismo lo acusa de planear los actos que realizó Kanye West en su contra, incluyendo la “humillación” en los Premios MTV VMA 2009, donde el esposo de Kim Kardashian interrumpió en su discurso de agradecimiento y durante los años posteriores envió mensajes negativos a la cantante.
“Ahora Scooter me ha despojado del trabajo de toda mi vida, del que no me han dado una oportunidad para comprar. Básicamente, mi legado musical está a punto de quedarse en las manos de quien lo ha querido desmantelar”, explica. Según Swift, este es “el peor escenario” al que se podía enfrentar. Ella sabía que el dueño de su anterior discográfica podía llegar a vender sus derechos, pero nunca pensó que Braun se haría con ellas: “Sabía lo que estaba haciendo, los dos lo sabían. Controlar a una mujer que no querría asociarse con él. A perpetuidad. Eso significa para siempre”. Como ella dice: “Ni en mis peores pesadillas me imaginé que el comprador sería Scooter”.
“Dejo mi pasado en manos de Scott, pero no mi futuro”. La artista confía en que todo esto pueda servir a “jóvenes artistas con sueños musicales a aprender a protegerse en las negociaciones”, y ahora enfrente su carrera con “Lover”, disco que firmó bajo Universal Music y que será considerado como la única placa discográfica que legalmente le pertenece a la intérprete de “End Game”.