Las fiestas de diciembre pueden parecer una distracción en el camino a lograr una plaza de una OPE, pero en realidad pueden resultar una oportunidad si se aprovechan.
Las fechas navideñas pueden ser una gran oportunidad en el proceso de preparación de una oposición. Sin embargo, para sacar la mayor rentabilidad de las mismas hay que ser capaz de encontrar un punto de equilibrio: por un lado, disfrutar de unos días de un merecido descanso; pero por el otro, no dejar de estudiar completamente para que no cueste tanto volver a la rutina después.
En otras palabras, no invertir más que un par de horas de estudio diario durante el parón de diciembre que servirá para tener fresco el temario e, incluso, para poder adelantar en el material a estudiar, pero sin la presión de una jornada habitual de preparación. Para que se logre el mejor resultado sería recomendable tomar algunos tips.
Por ejemplo, es preferible que (a pesar de ser unos días de descanso) se cuente con un plan de estudio diseñado para las fiestas. En este sentido, es importante determinar un horario que sea más flexible y que se adapte a las tradiciones familiares, así como a las habituales compras navideñas, visitas y planes que puedan ir surgiendo. La clave está en que el plan de estudio sea realista y que se cumpla.
Otro aspecto fundamental es que se aproveche los siguientes días para lograr despejar la mente, salir de casa, tomar un tiempo para compartir con los seres queridos y aumentar el tiempo dedicado al ejercicio físico. El salir del hogar también puede ser una excusa para pasar por una biblioteca y aprovechar un par de horas de estudio lejos de los preparativos y ambiente festivo del hogar.
Los aspirantes tendrán que tener cuidado con los abusos en comida o bebida, ya que son un aspecto que desencadenará directamente en su rendimiento académico. No es secreto para nadie que las digestiones pesadas suelen producir es cansancio y sueño. En este sentido, quizás lo más prudente es procura mantener una dieta equilibrada, y dejar los excesos de comida y bebida para los días que no te vayas a poner delante de los libros.