El próximo año vendrá cargado con muchas plazas disponibles para formar parte de la administración pública de Galicia debido a la gran cantidad de jubilaciones
Atrás quedan los años en los que las convocatorias de ofertas públicas de empleo eran ridículas, se acumulaban de un ejercicio para otro o, simplemente, no se producían. La crisis que alcanzó a las instituciones en la primera mitad de esta década y las restricciones en las tasas de reposición de personal han embalsado una gran demanda que desde este mismo año ha empezado a despejarse. La Consellería de Facenda ya utiliza con frecuencia el calificativo de «históricas» para referirse a las últimas oposiciones que ha convocado, porque ciertamente lo son, al menos en lo cuantitativo. Es tentador poner el foco político en las elecciones del 2020 para justificar el despliegue, pero lo cierto es que es muy probable que en algunas especialidades se sigan batiendo récords cada año ante la cascada de jubilaciones que se avecinan en la Administración autonómica, que tiene previsto agotar su cupo de reposición. Hasta el 2024 se jubilarán 18.000 trabajadores en la Xunta, aunque la mayoría son del ámbito de la docencia y la sanidad, que acaparan algo más de un 70 % del empleo público en Galicia, y por tanto se trata de plazas que tienen unos requisitos de formación específicos.
Administración xeral
1.200 para este año. Son las oposiciones que generan más expectación, a pesar de no ser las más importantes en volumen. Son muy esperadas porque permiten consolidar puestos de personal que busca mayor estabilidad y es habitual el acceso libre a cualquier persona, con independencia en muchos casos de la formación que acredite. Tienen varios niveles que recorren prácticamente toda la escala salarial de la Xunta, y para el 2020 se convocarán 1.200 plazas. Algunas ya han salido días atrás, pero seguirá el goteo en el DOG porque uno de los objetivos del Gobierno gallego, pactado con los sindicatos, es conseguir rebajar la tasa de temporalidad por debajo del 7 %. También tendrán demanda las cerca de 600 plazas de empleo social convocadas este mismo trimestre.
Educación
Nuevo ingreso y promoción. Las exigencias del calendario escolar obligan a la Xunta a ser exhaustiva y puntual con los ciclos de las ofertas, que este año ha adelantado unos meses para poder aprovechar una tasa de reposición mayor. Esta circunstancia permitirá ofrecer en el 2020 algo más de dos mil plazas de nuevo ingreso y 1.618 de promoción interna que alcanzarán las 88 especialidades, desde profesores de FP, instituto o escuelas de idiomas, pasando por especialistas de artes escénicas, musicales o plásticas. Treinta de las especialidades que concurrirán llevaban una década sin convocarse, por lo que se espera una participación masiva pese a tratarse de cuestiones tan concretas como la docencia en torno a determinados instrumentos musicales.
Sanidad
Las más mimadas. Las oposiciones del sector sanitario suelen ser abultadas en número, pero tienen menor impacto social por el tipo de plazas que se convocan. También son las más mimadas por la Xunta, que se ha visto obligada a comprometer políticamente decenas de nuevos puestos ante la crisis de la atención primaria, que se ha resuelto con una redefinición estratégica que implica más personal cualificado. De hecho, Galicia cuenta con una prerrogativa estatal al haber cumplido con los parámetros de eficiencia financiera, lo que le permite ampliar hasta un 8 % la tasa de reposición. Lo normal es que este margen se hubiese repartido entre distintos sectores, pero este año la gestión de ese empleo recaerá íntegramente en el servicio público de salud. Las últimas convocatorias dan algunas pistas de la demanda que viene: De las 1.500 plazas que están en juego para los próximos meses en Galicia, 772 son para técnicos en cuidados auxiliares de enfermería. Le siguen en oferta, por descontado, los médicos de atención primaria (254) y los pediatras de atención primaria (93), dos especialidades que tienen garantizado el trabajo (no la plaza) con solo levantar el teléfono y llamar al Sergas. La necesidad es tal que algunos de estos puestos ya han sido anunciados por el Gobierno vinculados a los presupuestos del 2020. Habrá al menos 407 plazas, de las que 252 serán para personal sanitario, fundamentalmente enfermeros; 133 para médicos; y las otras 22 se cubrirán con trabajadores de servicios.
Promoción interna
Mil plazas. En total, la Xunta está ejecutando procesos selectivos de acceso libre para un total de 54 categorías, con 2.400 plazas en juego, y está elaborando nuevos concursos-oposición que se irán conociendo a lo largo del 2020. A esta oferta hay que añadir las de promoción interna reservada a empleados públicos que ya tienen plaza en la Administración de Galicia y que quieren aspirar a un puesto de mayor categoría siempre que reúnan los requisitos y superen el correspondiente proceso selectivo. Son un millar de puestos. En ámbitos como el educativo, la Xunta pone en valor el «salto de calidade» que supondrá la convocatoria de 1.300 plazas de catedráticos, una histórica reivindicación del profesorado que le permite alcanzar su mayor nivel académico y recibir complementos retributivos y el acceso a jefaturas de departamento. La gran mayoría de estas cátedras irán para enseñanza secundaria (1.232), mientras que se reservan 50 para los docentes de las escuelas oficiales de idiomas y 18 para artes plásticas y diseño.
Traslados
Cambios y discapacidad. El Gobierno de Galicia también tiene intención de mantener la línea iniciada de reserva de plazas para discapacitados intelectuales —el 1 de diciembre hubo exámenes en Silleda— y lanzará en el 2020 el mayor concurso de traslados, con 1.900 plazas. Un 2 % de ellas se reservan para acoger a funcionarios de otras administraciones.
La Administración General del Estado también esta trabajando en sus convocatorias, que en condiciones normales deberían conocerse en el primer trimestre del 2020, aunque desde el Ministerio de Administraciones Públicas condicionan el calendario «a que haya Gobierno». En la última, de este año, se acumularon procesos anteriores y salieron algo más de 8.000 plazas, de las que 6.000 eran para el cuerpo general administrativo o de auxiliares. Los profesionales que están encontrando mayores oportunidades en estas convocatorias son los informáticos. La gestión de sistemas y los técnicos generaron para el Estado 900 puestos.