Hay que señalar que desde más o menos mayo del año 2021 se viene experimentando una subida de precios, fundamentalmente, de materias primas como aluminio, madera, vidrio, por citar a algunas, y que además, venía acompañada y sustentada, precisamente, por un desabastecimiento de todas ellas en los mercados.
Esto fue explicado porque sucedía como consecuencia de las dificultades que existían en la cadena de suministro. Los pseudoexpertos europeos decían que era algo coyuntural y que además, sería efímero. Pues incluso llegaron a augurar que para septiembre, esto iba ya a subsanarse.
Algunos pensábamos sobre todo economistas norteamericanos, que por desgracia no iba a ser así y que este periodo de inflación iba a ser bastante más largo, como se ha demostrado. Ahora ya instituciones europeas señalan claramente, que por lo menos hasta casi finalizar el año 2023 esta inflación va a continuar. Y tal vez vuelvan a errar en sus previsiones y sea aún más por un periodo de tiempo mayor.
Las causas de esta crisis económica las señalan fundamentalmente, en los aumentos de precios en el gas, que hace que la electricidad suba, el petróleo y que es acentuado, todo ello, por la guerra en Ukraina.
Sería muy interesante analizar en profundidad cual es realmente la influencia en concreto de todos estos factores señalados. Pues es difícil comprender que habiendo estado, estos pasados meses, el precio de la electricidad a un nivel más alto de 300 euros, ahora que se encuentra su precio alrededor de 200 euros, este factor esté ocasionando que el precio suba, semana a semana, de muchos artículos por concretamente el precio de la electricidad. En lo relativo al petróleo, conviene destacar que hace algunos meses, fue publicado que se había llegado a un acuerdo con países de la OPEP, para que incrementasen su producción de crudo.
Hay que decir que haciendo un seguimiento de la evolución de los precios, en algunos hipermercados en este país, se debe exponer que es cuanto menos curioso, que por citar algunos ejemplos concretos, existe una subida en los precios del pan de molde e incluso incomprensiblemente, un desabastecimiento de este producto de marcas blancas que convendría que sea posible explicar. Además se puede observar que en el caso de ciertas bebidas azucaradas, embutidos y hasta patatas fritas, se puede ver también, que hay algunos artículos concretos que los fabricantes no han trasladado esta subida de precios tan salvaje.
Todo lo cual puede inducir a tener cierta sospecha y hacer pensar que existe al menos alguna incoherencia en los precios PVP que tienen. Y que tal vez, esta inflación enorme que nos sobreviene, tenga algunas causas que no sean estrictamente, derivadas de la Oferta y la Demanda, ni tampoco causadas, sólo, por la subida de precios de las materias primas.
Por lo que creo conveniente que sería de gran interés realizar un análisis en profundidad, de la formación de precios que está teniendo lugar, en estos momentos, y así poder comprender que es lo que realmente está provocando esta inflación, ya que en algunos artículos puede resultar inexplicable, salvo cabe sospechar que sea originada, tal vez, por los propios mediadores, pues se debe tener presente que hay muchos suministros que cuyos precios están ya pactados con anterioridad. Y que lógicamente, ahora, no deberían ser un factor que tensione esta subida de precios en esos productos concretos, que casi día a día estamos padeciendo.
Obviamente conocer la etiología de este asunto es importantísimo para poder adoptar las medidas pertinentes. Pues la subida de los tipos de interés de intervención es evidente que va a provocar una recesión económica y que es un craso error. Pues la inflación es ocasionada por el lado de la Oferta y no de la Demanda. La Teoría Económica dice claramente, que subir los tipos de interés tiene sentido cuando existe una Economía » recalentada» por la Demanda. Lo cual indiscutiblemente no es el caso. Porque se debe tener en cuenta que está inflación, está provocando evidentemente, que la Demanda se contraiga por causas de la falta de poder adquisitivo que está experimentando la ciudadanía.
Y si a esto ahora se va a añadir la subida de tipos de interés, indefectiblemente es algo lógico, que abocará a un empobrecimiento de la ciudadanía, que ocasionará obviamente, una aún mayor contracción de la Demanda. Y esto a su vez, es insoslayable, esa indiscutiblemente, posible recesión económica que he señalado con anterioridad.
Josu Imanol Delgado y Ugarte. Economista