
Cientos de médicos de toda España han salido a las calles este jueves para manifestarse frente al Ministerio de Sanidad en rechazo al nuevo estatuto marco impulsado por la ministra Mónica García. Los profesionales sanitarios denuncian que la normativa no solo no soluciona las condiciones precarias de la profesión, sino que, en algunos casos, las agrava. Su principal exigencia es la creación de un marco regulador específico para la profesión médica, una petición que el Ejecutivo ha rechazado hasta el momento.
Bajo el lema «Por un estatuto propio de la profesión médica y facultativa», las ocho organizaciones convocantes han calificado la medida del Ministerio como un «atropello» a los derechos de los médicos. Consideran inaceptable que su regulación quede dentro del estatuto marco, que engloba tanto a sanitarios como a otros trabajadores del Sistema Nacional de Salud, sin diferenciar sus necesidades y particularidades.
Un conflicto que crece: médicos vs. Sanidad
El nuevo estatuto marco ha generado una fuerte confrontación entre el Ministerio de Sanidad y el colectivo médico. Mientras que la cartera de Mónica García defiende que la reforma reduce la inestabilidad laboral y mejora las condiciones de trabajo, los sanitarios sostienen que la realidad es otra. Entre los puntos más controvertidos del borrador destaca la incompatibilidad para que jefes de servicio y otros cargos intermedios trabajen tanto en la sanidad pública como en la privada.
El Ministerio justifica esta medida argumentando que así se garantiza un «desempeño ético» y se evitan conflictos de interés. A cambio, ofrece un complemento salarial por exclusividad. No obstante, los médicos ven en esta normativa una forma de restringir su libertad laboral y temen que provoque una fuga de talento hacia el sector privado o al extranjero.
El enfrentamiento ha escalado hasta tal punto que el Ministerio de Sanidad lanzó recientemente un documento titulado «Preguntas frecuentes sobre el estatuto marco», en el que desmiente algunas de las afirmaciones de los sindicatos médicos. «Frente a bulos, desinformaciones y malentendidos, desde el Ministerio resolvemos las dudas», afirmó Mónica García en sus redes sociales, intensificando aún más la tensión.
Sindicatos y colegios médicos, unidos en la protesta
La convocatoria de la protesta ha reunido a un amplio número de organizaciones del sector. Entre los principales convocantes se encuentran la Confederación Española de Sindicatos Médicos (CESM) y otros sindicatos autonómicos como el Sindicato Médico Andaluz (SMA), Metges de Catalunya, el Sindicato Médico de Euskadi (SME), el Sindicato de Médicos de Navarra (SMN), el Sindicato de Facultativos de Galicia Independientes Omega y el Sindicato de Empleados Médicos de Canarias (Semca).
A la manifestación también se han sumado asociaciones como Sime-CSIT Unión Profesional, el Sindicato de Médicos de Atención Primaria (SMP), la Asociación MIR España (AME), la Asociación Avanza Médica (AM) y la Asociación de Médicos Unidos por sus Derechos (MUD). Además, han asistido delegados sindicales y representantes de los colegios de médicos de todo el país, consolidando una de las mayores muestras de rechazo al estatuto marco.
Negociaciones suspendidas: el conflicto sigue abierto
La manifestación de los facultativos coincidía con una nueva reunión de negociación del estatuto marco entre el Ministerio y los sindicatos. Sin embargo, el encuentro fue suspendido por falta de quórum, ya que las organizaciones sindicales más representativas (CSIF, FSES, CCOO, UGT y CIG Saude) han exigido una reunión urgente con la ministra antes de continuar el diálogo.
Los sindicatos denuncian que el debate se ha visto distorsionado por la cobertura mediática y la postura del Ministerio, lo que ha generado un ambiente de tensión que dificulta el avance de las negociaciones. Consideran necesario aclarar los términos en los que debe llevarse a cabo el proceso antes de continuar con cualquier discusión sobre el estatuto marco.
Un conflicto sin solución a la vista
La protesta de los médicos evidencia un descontento profundo dentro del sector sanitario. La falta de acuerdos con el Ministerio y la negativa a concederles un convenio propio han hecho que los médicos tomen las calles en defensa de sus derechos laborales.
Mientras el Ministerio insiste en que el estatuto marco traerá mejoras, los médicos ven en la normativa una amenaza para su estabilidad y desarrollo profesional. Con las negociaciones suspendidas y el malestar en aumento, el conflicto sanitario en España parece lejos de resolverse.