El temario de la prueba de acceso a la formación sanitaria especializada podrá contar con aspectos nuevos en materia de Cardiología y Oncología.
El examen MIR podrá modernizar su temario. Para la directora docente de AMIR, Aida Suárez, existen tres temas de actualidad que cuentan con “muchas papeletas” para estar presente en la actual convocatoria de acceso a la formación sanitaria especializada. Según ha adelantado a IberoEconomía, las nuevas preguntas estarán vinculadas con el área de la Cardiología y de la Oncología.
En este sentido, considera que “dentro de Cardiología parece que la llegada al MIR del fármaco sacubitril-valsartán, recientemente incluido en las guías de Insuficiencia Cardiaca, es inevitable”, ha explicado Suárez. Sin embargo, no es el único tema apegado a la actualidad que podrá ser evaluado por el Ministerio de Sanidad. “Por otro lado, este año se ha publicado revisiones del manejo del hepatocarcinoma y del TNM del Cáncer de Pulmón, temas extremadamente relevantes en el MIR y, por tanto, tienen muchas papeletas de ser preguntados”, ha puntualizado.
Sin embargo, advierte que “es muy difícil vaticinar, hay novedades con mucho peso en Medicina que no se han preguntado en el MIR hasta muchos después de su publicación”. De ahí que resulte necesario tomar en consideración y preparar a profundidad aquellas asignaturas que suelen tener un mayor peso dentro de la evaluación para acceder a la residencia.
“La verdad es que las cuatro asignaturas con más peso se han mantenido bastante estables: Digestivo y Cirugía General, Cardiología, Estadística y Epidemiología e Infecciosas. No creemos que esta tendencia se vaya a modificar por la relevancia que estas disciplinas suponen para cualquier médico de cualquier especialidad, y por la prevalencia de las patologías asociadas”, afirma Suárez.
La directora docente no pasa por alto que “en cuanto a temas que no tienen mucho peso en el cómputo global, pero que sí son especialmente novedosos en los últimos años, destacaría las preguntas referentes a la relación y comunicación médico-paciente. Se han convertido en una constante en el MIR y aportan una valoración de aspectos profesionales y humanos no teóricos”.