La formación sanitaria especializada no siempre es necesaria para lograr una salida laboral.
Una nueva generación de ‘mestos’. Los registros colegiales revelan que, en España, hay 14.658 médicos sin formación sanitaria especializada. Una generación que se han visto influenciada por el decrecimiento de las plazas MIR, el desequilibrio de los númerus clausus y el incremento de la creación de Facultades de Medicina.Sin embargo, no son un grupo que esté excluido del mercado laboral.
Un grupo importante se encuentra en la sanidad privada. No obstante, es una fórmula que se ha venido complicando durante los últimos años. ¿El motivo?, el incremento en el número de contrataciones de especialistas para sus equipos. En este sentido, será fundamental contar con un perfil diferenciador que sea lo suficientemente atractivo para conquistar el interés del centro, al margen de no contar con el MIR en el currículum.
El Ejército
Otra fórmula es alistarse al Ejército. Los médicos podrán aprovechar sus conocimientos teóricos y prácticos para apoyar las operaciones conjuntas o combinadas de los cuerpos militares. Entre sus funciones principales de la Sanidad en Campaña está la selección, conservación y recuperación del personal desde una perspectiva médica, minimizando el efecto de las lesiones o enfermedades que puedan contraer los miembros de las unidades. Sin embargo, hay que cumplir con algunas condiciones mínimas.
El Ministerio de Defensa establece que, además de la licenciatura o título en Medicina, el candidato deberá tener entre 18 y 33 años, contar con la nacionalidad española y carecer de antecedentes penales. Asimismo, deberá superar pruebas prácticas, tener dominio del inglés y pasar exámenes psicológicos (aptitudes intelectuales y de personalidad) y psicofísicos (reconocimiento médico y pruebas físicas).
Con estas barreras superadas, el médico está preparado para dar asistencia a las Fuerzas Armadas, además de trabajar en las áreas de Medicina preventiva,inteligencia sanitaria, formación o investigación de la Medicina militar y en ambientes extremos.
Investigación
La experiencia militar no es apta para todos los profesionales sanitarios. Al contrario, hay quien prefiere la tranquilidad de un laboratorio antes que la adrenalina de los campos de batalla. Si bien el dedicarse a la investigación suele significar poner en pausa la asistencia sanitaria, no dejan de ser una pieza clave para el Sistema Nacional de Salud (SNS), dando nuevos pasos en la incorporación de nuevas tecnologías, descubrimientos y avances que ayudarán a mejorar la calidad de vida de los pacientes o, al menos, a combatir con más efectividad sus enfermedades.
Emigración
Los médicos también pueden buscar en otros países las oportunidades que no encuentran en España. Por ejemplo, una de las opciones más cómodas para intentar la especialización es intentar aprobar el ‘MIR italiano’, una prueba que no exige demostrar el conocimiento del idioma ni que cuenta con un cupo para los aspirantes extracomunitarios, siendo una gran oportunidad para acceder a la residencia que tendrá validez en España. Sin embargo, no es el único destino habitual, ya que también hay un elevado número de médicos provenientes de facultades españolas que viajan a Inglaterra, Estados Unidos, Japón y Canadá para probar suerte.
La emigración también puede tener una vertiente más benéfica. Son muchas las ONG que buscan a médicos para formar parte de los equipos que viajan a las zonas más necesitadas del mundo para ofrecer sus servicios. Una oportunidad que permite ganar experiencia en el ámbito sanitario, así como aprender a adaptarse a situaciones difíciles que se alejan de la teoría impartida en las facultades de Medicina. Muchos consideran estos viajes una forma de reencontrarse y volver con más fuerza para intentar, de nuevo, superar el examen MIR.