Aunque en el preacuerdo de gobierno solo se menciona la vivienda como «derecho y no como mercancía», ambos partidos coinciden en movilizar viviendas vacías
El preacuerdo para un gobierno de coalición firmado por PSOE y Unidas Podemos solo menciona a la vivienda para reconocerla como «derecho y no como mera mercancía», sin embargo, ambas formaciones comparten varias medidas en esta materia en sus respectivos programas electorales. En concreto, los dos coinciden en la necesidad de movilizar vivienda vacía y de ofrecer alquileres a precios «asequibles».
Además, según el análisis de los programas de las dos formaciones realizado por Europa Press, tanto los socialistas como los morados mencionan a los «los grandes tenedores de vivienda», en referencia a las sociedades que más propiedades acumulan y prometen adoptar medidas para sacar a oferta los pisos que no se encuentren habitados.
Así, el PSOE habla de impulsar «una oferta de vivienda de alquiler seguro y estable a precios asequibles movilizando las viviendas vacías y a los grandes ‘tenedores de vivienda’, recuperando su función social, frenando las subidas abusivas de precios y apoyando en particular el acceso de los jóvenes», para lo que anuncian «ayudas al alquiler en proporción a su renta».
Sin embargo, los socialistas no detallan la fórmula para movilizar estas viviendas vacías, algo que sí concreta el programa de Unidas Podemos, que apuesta por la cesión obligatoria y sanciones a estos grandes tenedores de vivienda vacía «para impedir el acaparamiento y la especulación» con la misma.
Asimismo, los morados apuestan por auditar «activos tóxicos de las entidades financieras rescatadas con dinero público», por incorporar viviendas vacías «cedidas a fondos buitre o a la Sareb» a los programas de vivienda y por elaborar un censo público de viviendas vacías en propiedad de bancos, fondos de inversión y otras empresas.
Tanto PSOE como Unidas Podemos dirigen su estrategia a la constitución de un «gran parque de alquiler asequible», un objetivo compartido por las dos formaciones en sus programas electorales como principal medida para facilitar el acceso a la vivienda.
Otro de los puntos comunes es la apuesta por la rehabilitación de viviendas, enfocada en el marco de una mayor eficiencia energética. El PSOE habla de un Plan de Vivienda Sostenible, con una estrategia hasta 2050 y Unidas Podemos aboga por rehabilitar «al menos 500.000 viviendas al año para promover la eficiencia energética y la reducción de la factura de la luz».
Unidas Podemos también busca establecer un contrato de alquiler «indefinido», con «causas claras de rescisión justificada», acabar con las socimis y una de las propuestas que pactó con el PSOE para los Presupuestos de 2019 y que finalmente no llegó a ejecutarse: el control de los precios en zonas y barrios «especialmente tensionados».
El PSOE habla en su programa de «moderar el crecimiento de los precios» en el alquiler, pero a través de la oferta de ese «gran parque público», la promoción de entidades públicas y cooperativas y el establecimiento de medidas fiscales para incentivar la oferta «alquiler asequible».
En este sentido, recoge que la evolución de los precios «será objeto de un índice estatal», cuya creación se recogió en el decreto aprobado a principios de año para aumentar la duración de los contratos.
Unidas Podemos también habla de «índices de precios de referencia adaptados a las realidades locales», y promete habilitar a los ayuntamientos para que puedan «regular los precios» con el fin de que «ninguna familia pague más del 30% de su renta en concepto de alquiler»