Naturgy anunció que obtuvo un beneficio neto de 383 millones de euros en el primer trimestre de 2021, un aumento del 92,5% respecto a las ganancias del mismo periodo del ejercicio anterior.
Este incremento se debió, principalmente, al cierre en marzo del acuerdo para resolver de manera amistosa las disputas que afectaban a Unión Fenosa Gas (UFG) desde 2012, mediante el recibo del pago en efectivo de unos 600 millones de dólares, así como la mayoría de los activos fuera de Egipto -excluidas las actividades comerciales de UFG en España-, que tuvo un impacto positivo no ordinario de 65 millones de euros en ganancias.
El resultado bruto de explotación (Ebitda) de la energética presidida por Francisco Reynés a finales de marzo se situó en 982 millones de euros, un 9,8% más.
Los resultados de la energética en este primer trimestre baten así la media del consenso de analistas, que estimó un Ebitda reportado de 943 millones y unas ganancias de 300 millones de euros.
Excluyendo los elementos no recurrentes, el beneficio neto ordinario del grupo ascendió a 323 millones de euros, un 3,5% más, mientras que su Ebitda ordinario alcanzó los 1.029 millones de euros a cierre de marzo, un 2% menos.
El presidente de Naturgy, Francisco Reynés, destacó «la capacidad de la compañía para lograr resultados y crear valor en el día a día a pesar del contexto«.
«Nuestra actividad lleva a posicionarnos como un agente activo en la transición energética que quiere contribuir a la recuperación económica, en línea con nuestro compromiso con la sociedad. Naturgy está inmersa en una profunda transformación, necesaria en el actual entorno, que nos obliga anticiparnos a los retos que plantea el sector», dijo.
La energética presenta estos resultados en plena OPA parcial lanzada el pasado mes de febrero por el fondo australiano IFM para hacerse con hasta un 22,69% de su capital. La oferta está sujeta a la aprobación del Gobierno para después continuar los trámites ante la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
IMPACTO DEL COVID-19.
El grupo destacó que, pesar de la mejora en el panorama económico y la recuperación gradual de los precios de las materias primas, el Covid-19 ha continuado afectando negativamente al comportamiento operativo en forma de incertidumbre macroeconómica y una depreciación significativa de las divisas en Latinoamérica.
Así, Naturgy se encuentra inmersa en el despliegue de iniciativas de transformación que permitan recuperar la competitividad a pesar de los desafíos energéticos y macroeconómicos. «Todo ello en un contexto donde ya se comienzan a vislumbrar signos de mejora», indicó.
Durante el primer trimestre, las inversiones totales del grupo ascendieron a 196 millones, un 2,5% menos debido a una mayor optimización del mantenimiento y al efecto de las divisas.
En lo que respecta a la deuda neta, a 31 de marzo ascendía a 13.597 millones de euros, en línea con los niveles de deuda neta a cierre de 2020.
Este nivel de deuda todavía no refleja los ingresos antes de impuestos de 2.570 millones de euros previstos en la venta de la chilena CGE Electricidad, operación acordada con la china State Grid por 2.570 millones de euros que espera completar durante el segundo trimestre de este año.
AVANZANDO EN SU APUESTA POR LAS RENOVABLES.
Asimismo, en este inicio de 2021, la compañía ha seguido avanzando en su apuesta por las renovables, tanto a nivel internacional como nacional. De esta manera, en el mes de enero cerró la compra de una cartera de proyectos renovables en fase inicial de desarrollo en Estados Unidos por un total 8.000 megavatios (MW) en energía solar y 4.000 MW en almacenamiento.
Por otro lado, resultó una de las principales adjudicatarias de la subasta convocada por el Gobierno de España con un total de 235 MW (38 MW eólicos y 197 MW fotovoltaicos) y se hizo con 45 MW de capacidad solar en Canarias, lo que permitirá al grupo duplicar su capacidad instalada actual en las islas.
Además, Naturgy ha identificado oportunidades de inversión por valor de casi 14.000 millones de euros en un centenar de proyectos propios a desarrollar en los próximos años en el marco del programa Next Generation, entre los que destacan aquellos alrededor de los gases renovables, hidrógeno y biometano