La nueva forma de comprar la ropa, el ejemplo de Mango y Desigual

Mango y Desigual

Las tiendas de ropa pueden seguir el ejemplo de Mango y Desigual en el norte de Europa: restricciones al aforo, equipos de protección y una persona en los probadores

Mango y Desigual son los primeros operadores españoles del comercio textil en empezar a levantar la persiana de alguna de sus tiendas, sobre todo en el norte de Europa, donde empiezan a aflojar las restricciones al funcionamiento de los comercios. No es el caso de España, donde el sector mira a mayo como fecha como para poder empezar a hacerlo.

Sin embargo, esa relativa vuelta a la normalidad en estas dos firmas viene acompañada de medidas de higiene y seguridad con las que los consumidores deberán ir acostumbrándose, también cuando lleguen a España, al igual que ha ocurrido en el sector de los supermercados. Los operadores del sector textil vienen trabajando desde hace semanas en los protocolos que deberán seguir cuando puedan abrir, e incluso interpelando al Gobierno central a que les especifique todos aquellos aspectos que deberán garantizar para garantizar la seguridad de clientes y trabajadores.

En los casos de Mango y Desigual, las medidas implantadas se pueden resumir en tres ámbitos: restricciones al aforo; equipamiento de seguridad para empleados y también para clientes; y medidas extraordinarias en un punto clave de estas tiendas: los probadores. Así se comprará ropa en la era post-Covid

Equipos de protección

En las tiendas que han abierto en Austria, Alemania y Holanda, Mango y Desigual proveerán de guantes y desinfectante de manos a clientes y empleados. Estos últimos, además, llevarán mascarillas, por lo que los consumidores deberán acostumbrarse a interactuar con un personal de tienda protegido. En este ámbito, son medidas similares a las que han ido tomando las empresas de supermercados en España, que han seguido funcionando en los peores momentos de la pandemia.

Menos gente

También habrá restricciones de aforo. En las primeras tiendas que reabrirá, Mango permitirá la entrada como máximo de una persona por cada 10 o 20 metros cuadrados, según las restricciones locales. En su caso, será el personal de estos locales los que controlarán que se respeta esta medida, que estará señalizada en los mismos. El staff también se encargará de indicar puntualmente a los clientes de que tienen que mantener una distancia de seguridad de al menos un metro y medio entre ellos.

Desigual , por su parte, dijo que garantizará que exista una distancia de entre un metro y metro y medio entre personas. Entre las tiendas que ha elegido para comenzar a volver a la normalidad no se encuentran algunas de más de 800 metros cuadrados de superficie, que haría más complicado este control de aforo.

¿Qué pasa con los probadores?

Un punto de concentración de clientes en las tiendas de ropa son los probadores. Y las cadenas textiles tomarán medidas. Mango los tendrá parcialmente abiertos, es decir, intercalará uno disponible y otro cerrado para garantizar las distancias de seguridad. Además, también aplicará una pequeña cuarentena a las prendas. Por ejemplo, aquellas que se prueben y que el cliente no compre se aislarán durante 48 horas, y lo mismo ocurrirá con las que sean devueltas tras su compra.

En Desigual solo se permitirá el acceso a una sola persona a los probadores, que serán desinfectados después de cada uso «e informando al cliente de la última vez que se ha llevado a cabo la limpieza». En el caso de esta última, el horario de apertura de las tiendas es reducido, de 12.00 a 18.00, y se prioriza el pago por tarjeta o móvil.

El comercio minorista abre el 11 de mayo aunque algunos abren el 4