La cerveza, en los bares. Así opina la mayoría de los ciudadanos, aunque hayan trasladado su consumo a casa a consecuencia del confinamiento y de las restricciones en el horario de apertura de los establecimientos.

Gelt, especialista en compra inteligente en el sector de gran consumo, ha estudiado en detalle este “matrimonio” que parecen formar cerveza y pandemia, para explicar mejor el comportamiento del consumidor a este respecto durante todo el año que se acumula ya desde que se desató la pandemia de coronavirus.

Según los datos de Gelt, la relación entre consumo de cerveza y confinamiento ha evolucionado, antes y durante la pandemia.

Antes del contexto Covid-19, el 63% de los consumidores de cerveza declaraba que prefería tomarla en establecimientos de hostelería antes que en el propio hogar.

Actualmente la cifra sube hasta el 69%, lo que demuestra cómo el confinamiento ha impulsado al alza la añoranza de volver a consumir en los bares.

De hecho, pandemia y cerveza forman un tándem inseparable. El consumo de cerveza durante la pandemia ha evolucionado de forma pareja a las restricciones y cierres de la hostelería.

Es importante destacar que cuando, el 22 de enero de 2021, se anunció en la Comunidad de Madrid el cierre de los establecimientos hasta las 21:00 horas, se produjo un pico de incremento en la venta de cervezas (11,3%).

Otro aumento muy representativo fue la subida del 78% que experimentó a mediados del pasado mes de marzo, justo cuando se produjo la “compra búnker” nada más iniciarse la pandemia, porcentaje que se mantuvo durante los primeros meses de confinamiento.

¿Quiénes son los más consumidores de cerveza?

El 35% de las ventas incrementales viene de dos tipos de unidades familiares: hogares de solteros y solteros con hijos;

Como detalle sobre la compra, la mayor parte de esas ventas, un 69%, se produjo en las visitas a los supermercados de entre viernes y domingo; y un 52% de ellas se realizan en horario de tarde/noche.

Otras bebidas alcohólicas

El comportamiento en el mercado de otras bebidas alcohólicas se ha movido de forma paralela al de la cerveza.

El vino, la ginebra y el ron muestran también picos importantes de compra en los supermercados, aunque la mitad que la cerveza.