El Gobierno y los principales sindicatos han alcanzado un acuerdo para aumentar las cotizaciones sociales de los trabajadores y costear así las futuras pensiones de los ‘baby boomers’, la generación más numerosa nacida entre finales de los cincuenta y finales de los setenta; un pacto del que, sin embargo, se ha descolgado la patronal de empresarios al considerar que «tiene efectos negativos” sobre el empleo y va “en dirección contraria” a lo que necesita el sistema público de pensiones.
Pero, ¿en qué se concreta este acuerdo?
La clave del pacto pasa por el diseño del llamado Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI). Este instrumento sustituirá al factor de sostenibilidad aprobado por el Gobierno de Mariano Rajoy en 2013, que buscaba garantizar la sostenibilidad del sistema de pensiones a través de la contención del gasto. Este nuevo mecanismo, sin embargo, lo que busca es incrementar los ingresos.
¿Cómo? Una de las principales vías es aumentar las cotizaciones sociales. El Ministerio de Inclusión y Seguridad Social y los sindicatos han acordado una aportación finalista de 0,6 puntos porcentuales de la cotización por contingencias comunes durante diez años.
En la actualidad, por contingencias comunes las empresas deben pagar un 23,6 % de la base de cotización, mientras que los trabajadores lo hacen en un 4,7 %.
¿Cómo se distribuirá esta subida de 0,6 puntos?
Este es precisamente el motivo de la negativa de la patronal. Este incremento de 0,6 puntos conllevaba que las empresas lo sufraguen en mayor medida: deberán asumir 0,5 puntos porcentuales de la misma, y el trabajador lo hará en el 0,1 restante.
De esta forma, las cotizaciones en ambos casos pasarían a ser del 24,1 % y del 4,8 %, respectivamente.
¿Y esto cómo se traduce en mi salario?
Según ha señalado el ministro de Inclusión y Seguridad Social, José Luis Escrivá, la subida de las cotizaciones de un sueldo medio «no llega a dos euros» para los trabajadores y «no llega a 10 euros» para las empresas, en el caso de un trabajador con la base media, de unos 2.000 euros mensuales.
Haciendo números, y teniendo en cuenta la base mínima (1.050 euros/mes) y máxima (4.070,10 euros/mes) de cotización, los trabajadores verían su nómina bruta reducida entre 1,05 y 4,07 euros mensuales, mientras que para los empresarios la subida supone pagar a la Seguridad Social entre 5,25 y 20,35 euros más cada mes.
El resultado en el salario neto dependerá de las deducciones que cada una de las partes pueda aplicar.
¿Cuándo comenzará a aplicarse?
La medida comenzará a aplicarse en 2023 y durante un periodo de diez años, hasta 2032.
¿Qué pasará a partir de entonces?
El acuerdo alcanzado este lunes también contempla que si a partir de 2033 se aprecia en los Informes de Envejecimiento (Ageing Report) de la Comisión Europea una desviación de la previsión de gasto en pensiones a 2050 respecto al informe de 2024 (que se usará como referencia), se utilizarán los recursos de este fondo, con un límite de disposición anual del 0,2 % del Producto Interior Bruto (PIB).
¿Cuál es el objetivo?
La medida tiene como fin reactivar el fondo de reserva de la Seguridad Social, conocido también como «hucha de las pensiones», donde ahora apenas quedan 2.000 millones y que al final del periodo podrá contar con 50.000 millones, según las estimaciones del Gobierno.
¿Y si resulta insuficiente?
Si los activos acumulados en este fondo no fueran suficientes para sostener el sistema, el Gobierno ha señalado que negociará con los interlocutores sociales para su elevación al Pacto de Toledo «una propuesta que, de forma equilibrada, se dirija bien a reducir el porcentaje de gasto en pensiones en términos de PIB, bien a incrementar el tipo de cotización u otras fórmulas alternativas para aumentar los ingresos».
¿Por qué ahora?
La reforma de las pensiones y su sostenibilidad es uno de los puntos acordados con Bruselas para recibir los fondos europeos y debía realizarse antes de final de año. Del mismo modo, se espera que durante los próximos años se jubile el grueso de la generación ‘baby boom’, por lo que es necesario tomar medidas para garantizar sus pensiones debido a la merma en la población en edad de trabajar.
¿Cuáles son los siguientes pasos a seguir?
Una vez obtenido el visto bueno de los sindicatos -ya que no era requisito indispensable contar con el ‘sí’ de la patronal, al contrario que con la reforma laboral-, el MEI se incluirá a través de una enmienda en el proyecto de ley sobre pensiones que actualmente se encuentra en tramitación en el Congreso de los Diputados. Por tanto, habrá que esperar a su aprobación.