Las apuestas y los deportes: al ritmo de los grandes avances

Las apuestas y el deporte

Estamos en una época en la que todo cambia vertiginosamente. En consecuencia, se han incorporado nuevas formas, conductas y costumbres, por eso el creciente mundo online de las apuestas y deportes.  Con facilidad puedes conocer la mejor lista de páginas de apuestas en español y echar una ojeada a las mejores opciones y modalidades. Este es un indicador muy claro de los cambios que amplían y visibilizan las oportunidades, a la vez de impulsar avances y progresos en todas las áreas.

El área deportiva es uno de los sectores qué ha vivido más notoriamente tales transformaciones. Las Olimpiadas de Tokio 2020, realizadas en el 2021, sintetizan la diversidad de avances que vive la humanidad. No solo en materia tecnológica, aplicada al espectáculo y a la observación del rendimiento de los atletas; hay cambios en la vestimenta, cambios en los implementos deportivos y por supuesto en la participación.

Nuevos tiempos, más diversidad y participación

En los Juegos Olímpicos realizados en el 2021, se observó una dilatada participación de la mujer. En el siglo XXI los avances no han sido solo tecnológicos, se han desarrollado enormes esfuerzos en materia de informática, pero también en protección al ambiente, igualdad de derechos y desarrollo social. En este sentido, hay grandes fuerzas que empujan hacia una sociedad más sana y libre.

Por supuesto, aún queda mucho camino por recorrer. En este sentido, los deportes tienen un gran valor, es un sector con ganancias multimillonarias y por tanto con una cobertura enorme en todo el mundo. Los deportes muestran y marcan tendencias.

A través del deporte se han gestado mayores niveles de inclusión e igualdad. Aunque en la actualidad quedan grandes vestigios de discriminación, la tendencia creciente es contraria a estas prácticas, la propensión es a la defensa de los derechos humanos.

Los deportes reflejan a la sociedad

No obstante, es sorprendente que hasta hace menos de 100 años las inequidades ocurriesen con mucha intensidad. Fue apenas en 1947 en que en las ligas mayores de beisbol jugó por primera vez un jugador afroamericano, llamado Jackie Robinson y fichado por Brooklyn Dodgers.

Caso similar el de fútbol, Viv Anderson en 1978 fue el primer jugador afro en usar la franela de la selección nacional de Inglaterra. Hasta hace poco tiempo los sectores dominantes de la sociedad, restringían la competición deportiva formal y de nivel internacional, solo había acceso a caucásicos caballeros de las clases altas, ya que eran promovidos por clubes de élites.

La participación deportiva de la mujer

Respecto al deporte femenino en las civilizaciones antiguas, un elemento que puede ser relevante es que la mujer podía ejercitarse en actividades físicas, pero no competencias. No obstante, se observaban diferencias, en especial vinculadas al reconocimiento de la mujer y su participación en la sociedad. La civilización egipcia no tenía restricciones respecto a las prácticas deportivas. Los tallados de las tumbas y otras artes egipcias, mostraban a las mujeres participando activamente en los juegos de pelota y natación.

Los romanos consideraban que la actividad física era beneficiosa tanto para el hombre como para la mujer. Mientras que en el periodo clásico de la Grecia Antigua las actividades de la mujer estaban restringidas, a quedarse en el gineceo y mantenerse confinadas en casa. En los Juegos Olímpicos de la antigua Grecia las mujeres no podían asistir, ni siquiera como espectadoras, mucho menos competir y jugar.

Algo similar sucedía en Roma, aunque algunas mujeres podían asistir a los espectáculos debían permanecer de pie como los esclavos. No obstante, se tiene evidencia de la existencia de gladiadoras en las arenas de lucha, así como en algunos frescos romanos en los que se observan mujeres jugando en acciones deportivas.

Las mujeres en las Olimpiadas

Miles de años transcurrieron hasta que por primera vez las mujeres compitieron en las Olimpiadas. Fue en París en el año 1900, donde participaron 22 mujeres (entre 997 atletas en general) con muchas restricciones, reservas y de manera muy limitada. Los deportes que les fueron permitidos eran los considerados “femeninos”, compitieron en tenis, equitación, vela, croquet y golf.

En los Juegos Olímpicos de Ámsterdam, 28 años después, concurrieron 300 mujeres contabilizando el 10% de los participantes. A partir de esta fecha la tendencia ha ido creciendo de manera significativa. En los juegos de Tokio de 2020 el 49% de los competidores fueron mujeres.

Desde 1991 está establecido que todo deporte que se agregue al programa olímpico, ha de incluir la participación femenil. En Londres 2012 todos los deportes del programa contaron con la competencia de mujeres.

Hay muchas competencias deportivas en las que la participación de la mujer es muy importante, como el fútbol femenino, cuyos juegos mundiales cuentan con millones de fans y espectadores, mostrando una creciente difusión. Las apuestas en vivo y directo crecientes en los casinos online, dan muestra de ello.