Según el Informe sobre la Riqueza Mundial que Capgemini acaba de publicar, el número de individuos con un elevado patrimonio neto[1] (HNWI) se redujo en 2022 en un 3,3% hasta los 21,7 millones, mientras que el valor de su riqueza disminuyó en un 3,6% hasta los 83 billones de dólares. Se trata de la mayor caída en diez años (2013-2022), provocada por la incertidumbre geopolítica y macroeconómica.
América del Norte registró el mayor descenso de la riqueza (-7,4%), seguido de Europa (-3,2%) y Asia-Pacífico (-2,7%). Por el contrario, África, América Latina y Oriente Medio se mostraron más resilientes y experimentaron un crecimiento financiero en 2022, gracias a los buenos resultados de los sectores del petróleo y el gas.
Las inversiones en ESG siguen siendo una prioridad, pero los gestores de patrimonios necesitan más datos sobre su impacto
Como resultado de la incertidumbre económica, sólo el 23% de los HNWIs declaró haber generado más rendimientos de los activos relacionados con ESG. Sin embargo, aun se muestran interesados en los productos ESG: el 41% de los encuestados afirmó que la inversión socialmente responsable es su prioridad principal; y el 63% de los HNWIs declaró haber solicitado puntuaciones ESG para sus activos. En cambio, pocas empresas de gestión de patrimonios le dan gran importancia al análisis de datos ESG (52%) y la trazabilidad (31%).
El 40% de los gestores encuestados afirmó que necesita más datos para comprender el impacto ESG y casi uno de cada dos reconoció que precisa más información relacionada con los criterios ESG para relacionarse eficazmente con los clientes.
Las empresas de gestión de patrimonios deben reconducir el rol del gestor financiero
Según el informe, la actual falta de herramientas digitales está limitando a los asesores a la hora de ofrecer asesoramiento financiero oportuno y conocimientos de valor añadido. También está afectando a su cuenta de resultados.
De media, solo uno de cada tres ejecutivos calificó de alta la madurez digital integral de su empresa. Además, el 45% afirmó que el coste por gestor financiero está aumentando, debido principalmente a las ineficiencias de la cadena de valor del patrimonio.
El informe también concluye que la demora en la preparación digital y las deficientes plataformas omnicanal aumentan el tiempo que los gestores dedican a actividades no esenciales, lo que deja solo un tercio de su tiempo disponible para la preventa y la interacción con el cliente. El 56% de los HNWIs encuestados afirmó que los servicios de valor añadido influyen en su elección de empresa de gestión de patrimonios, pero solo uno de cada dos se mostró satisfecho con la capacidad de su gestor para ofrecerlos. Casi el 31% probablemente cambiaría de proveedor de gestión de patrimonios en los próximos 12 meses.
El informe destaca que, para impulsar el crecimiento de los ingresos y aumentar la satisfacción del cliente, las empresas de gestión de patrimonios deben dotar a los gestores financieros de una interfaz integrada de negocio integral y crear una experiencia superior para el cliente. Por ejemplo, una estación de trabajo digital es el camino a seguir para mejorar la productividad y el compromiso con el cliente, proporcionando a los gestores la capacidad de movilizar y organizar a los expertos adecuados en cada momento para atender al cliente.
«Las empresas de gestión de patrimonios se encuentran en un punto de inflexión crítico, ya que el macroentorno está obligando a cambiar la mentalidad y los modelos de negocio para impulsar un crecimiento sostenible de los ingresos. La agilidad y la adaptabilidad van a ser fundamentales para los particulares con grandes patrimonios, ya que su atención se centra en la conservación del patrimonio. Por ello, el sector tendrá que reforzar el valor, capacitar a los gestores financieros y descubrir nuevas oportunidades de crecimiento para seguir siendo relevante», afirma Nilesh Vaidya, Director Global de Banca y Mercados de Capitales de Capgemini. «Su éxito estará ligado a la resolución de problemas relacionados con la falta de madurez digital en la cadena de valor de la riqueza».
Apuesta por el potencial de crecimiento a través del segmento «affluent”, los clientes más ricos
El informe también señala que la ampliación de la base de clientes potenciales de gestión de patrimonios es ahora un imperativo para ayudar a impulsar el crecimiento a largo plazo en todo el sector. El segmento “affluent”[2] representa una gran oportunidad, ya que esta población sigue creciendo en tamaño e influencia financiera. A nivel regional, Norteamérica (46%) y Asia-Pacífico (32%) concentran la mayor parte de los ricos del mundo en valor patrimonial y tamaño de la población. A pesar de poseer casi 27 billones de dólares en activos (casi el 32% del patrimonio total de los HNWIs), el 34% de las empresas no está explorando este segmento.
La inmensa mayoría de los clientes “affluent” (71%) está interesada en solicitar a sus bancos servicios de asesoramiento patrimonial en los próximos 12 meses. Para mantener bajos los costes operativos y proporcionar al mismo tiempo la experiencia que busca este segmento de clientes, la personalización basada en la tecnología será el camino a seguir. Según el informe, y en función de la escala y el alcance de las operaciones, las empresas de gestión de patrimonios pueden seguir tres opciones para crear una base de clientes acaudalados:
- Aprovechar la estructura existente de gestión de patrimonios acelerando la transformación digital integral.
- Desarrollar una propuesta de patrimonio como servicio (WaaS) utilizando canales de terceros, incluidos bancos minoristas y asesores independientes.
- Crear una plataforma dedicada a los servicios patrimoniales con herramientas de autoservicio para mejorar la gestión de los clientes.
[1] HNWI: Particulares con un elevado patrimonio neto y activos invertibles superiores a 1 millón de USD, excluida la vivienda habitual, los bienes de colección, los bienes de consumo y los bienes de consumo duraderos.
[2] Affluent: Franja patrimonial con activos invertibles comprendidos entre 250.000 y 1 millón de dólares.
Presentación del IV Informe sobre “Financiación de pymes y autónomos en Andalucía” de Garántia