El Ministerio de Economía atribuye el aumento al encarecimiento de la electricidad, los servicios turísticos, la telefonía, los artículos de cuidado personal y la restauración.
El Índice de Precios de Consumo (IPC) subió un 0,1 por ciento en febrero en relación al mes anterior y elevó su tasa interanual cinco décimas, hasta el 1,1 por ciento tras haber registrado en enero la tasa interanual más baja en 16 meses, alcanzando el 0,6 por ciento.
La tasa interanual de febrero es la decimoctava tasa positiva que encadena el IPC interanual e implica que los precios son hoy un 1,1 por ciento superiores a los de hace un año. Por su parte, la inflación subyacente, que no incluye los precios de los productos energéticos ni de los alimentos no elaborados, aumentó tres décimas en febrero, hasta el 1,1 por ciento.
El Ministerio de Economía ha señalado que en el repunte del IPC del pasado mes han influido principalmente el encarecimiento de la electricidad, la subida de los precios de los paquetes turísticos, la telefonía, de los artículos y productos para el cuidado personal y la restauración.
Por el contrario, bajaron en febrero los precios del carburante, que provocó descensos en la tasa de transporte, de la ropa y el calzado (debido al fin de la temporada de invierno), de los alimentos y bebidas no alcohólicas, y el de las legumbres y hortalizas frescas.
En tasa mensual, los precios subieron en febrero en 12 comunidades autónomas, se mantuvieron en Baleares, Cantabria, Castilla y León y Galicia y bajaron enCastilla-La Mancha (-0,1 por ciento).
Entre las doce comunidades que elevaron sus precios en el mes destaca Canarias, con un repunte del 0,4 por ciento, seguida de Andalucía, Aragón, Cataluña, Comunidad Valenciana, Murcia y La Rioja (0,2 por ciento en todas ellas), y de Asturias, Extremadura, Madrid, Navarra y País Vasco, donde los precios subieron un 0,1 por ciento respecto a enero.
En términos interanuales, el conjunto de las 17 comunidades presentaron tasas positivas en febrero, todas ellas superiores a las de enero. Las tasas más elevadas corresponden a Canarias y Cataluña (1,4 por ciento) y la más baja a Murcia, con un 0,6 por ciento.