La renovación del parque edificado con criterios de eficiencia energética es clave para reducir, de manera más eficiente, las emisiones de CO2 y otras partículas contaminantes a la atmósfera.
El paquete de ayudas procedentes de los fondos europeos, destinadas a la rehabilitación energética de edificios, facilitará la mejora del sector de la edificación en nuestro país. Sin embargo, durante el proceso de renovación de un bloque de viviendas es importante, además de incorporar tecnologías renovables, mejorar el rendimiento de los elementos existentes, por ejemplo, los radiadores, con la individualización de los consumos de energía, en este caso de la calefacción central.
Coincidiendo con el Día Mundial de la Eficiencia Energética, que se celebra el 5 de marzo, ISTA, compañía especializada en la fabricación, instalación y gestión de dispositivos de contabilización, considera que la instalación de contadores de energía y repartidores de costes en edificios con calefacción central es necesaria para mejorar la eficiencia energética del parque edificado y obtener, en consecuencia, los ahorros energéticos que exige Europa para justificar las ayudas recibidas.
“La individualización de consumos de energía en un edificio es clave; las soluciones tecnológicas existentes (contadores de energía y repartidores de costes) para medir el consumo, unidas a la implementación de energías renovables (aerotermia y fotovoltaica, principalmente) y de SATE en edificios, posibilitan una mayor reducción de kg de CO2 por euro invertido”, señala Ignacio Abati, director General de ISTA.
Así lo demuestra un estudio realizado por ANESE (Asociación Nacional de Empresas de Servicios Energéticos), a la que pertenece ISTA, dedicado a analizar algunas soluciones tecnológicas con el objetivo de integrarlas y así ayudar al fomento del parque inmobiliario.
Para llevar a cabo este estudio, la asociación ha elegido un edificio residencial tipo, de 25 viviendas y seis plantas, construido en un periodo anterior al Código Técnico de Edificación (CTE, 2007), que se sitúa en el municipio de Madrid, zona climática D3, y tiene una calificación energética “E”.
El informe “Paquetización de soluciones tecnológicas para la Rehabilitación Energética Eficiente de Edificios” revela, entre otras conclusiones, que con los paquetes integrados de aerotermia (más conocida como bomba de calor) junto con la individualización de consumos energéticos, e incluso unidos a la fotovoltaica y a la iluminación, se alcanza un mayor rendimiento económico del edificio. Asimismo, en los paquetes formados por SATE o fachada ventilada junto con individualización y aerotermia, se consigue que el edificio analizado pase de la calificación energética “E” a la “A”.
“En cualquiera de los paquetes tecnológicos analizados en los que se incorpora la individualización se mejora la eficiencia energética del 80% de los edificios”, destaca Abati.
ISTA recuerda que la calefacción es responsable del 56% de las emisiones contaminantes, y que en España cerca de 1,4 millones de viviendas tienen instalaciones térmicas centralizadas. Con la individualización de los consumos, se podrían dejar de emitir 1,05 millones de toneladas de gases de efecto contaminante a la atmósfera cada año.
Esta contabilización individual en edificios con calefacción central, a la que obliga el Real Decreto 736/2020, influirá positivamente, con o sin el funcionamiento de otras soluciones tecnológicas o de aislamiento, en la sostenibilidad del edificio, creen en ISTA.