Que el mercado de las criptomonedas está creciendo a pasos acelerados, no es un secreto para nadie.

Así lo demuestran algunas decisiones como la realizada por el DUX Internacional de Madrid. Se trata del equipo de fútbol de segunda división que tomó la innovadora decisión de realizar el primer fichaje a través de las criptomonedas (el 15 de enero de 2021). Sin olvidar que El Salvador transformó a las monedas digitales en una de sus divisas oficiales.

Además, son una oportunidad utilizada cada vez por más personas para invertir y almacenar más dinero.

Ahora bien, antes de lanzarse a la piscina e invertir en el mercado de las criptomonedas, es fundamental comprender qué son las criptomonedas. Muchos saben que es una moneda virtual que se sustenta en el blockchain. Ahora bien, también es común que se desconozcan cómo funcionan en la realidad y el papel que cumplen algunas figuras como
los verificadores.

Los operadores más novatos deben conocer que las monedas digitales cuentan con un archivo digital que resguarda en su interior a un código único. Una ‘clave secreta’ que sólo puede ser leída a través de programas que están específicamente diseñadas con esa finalidad, así como la de guardarlas y permitir que se realicen transacciones entre
diversos operadores.

¿Cómo se llegan hasta ellas?, pues existen tres canales comunes: el más evidente, comprarlas. Pero también pueden llegar a nuestras manos si las aceptamos como método de pago de nuestros productos o servicios o si, por el contrario, damos un paso más allá y decidimos ser quienes las crean.

Mientras los ‘mineros’ se encargan de resolver problemas matemáticos del sector a cambio de ser pagados con criptomonedas, las ‘ballenas’ son grandes empresas o grupos económicos que (a través de sus equipos de técnicos e informáticos) se han convertido en los grandes productores de monedas digitales.

Para quienes están empezando, la opción más segura y fácil de llegar hasta las criptomonedas es hacerlo a través de una plataforma de compra o un intermediario financiero.

Antes de invertir es fundamental que el operador cuente con un asesor  de confianza a su lado. Por ejemplo, Immediate Edge, es un software diseñado para captar las señales de comercio de cifrado en tiempo real, lo que le convierte en una herramienta clave para conocer exactamente qué comerciar y cuándo.

El software, que define las oportunidades a través del análisis de diversas variables, busca cuáles son las operaciones más rentables, lo que permitirá que los operadores no dejen pasar la oportunidad de generar beneficios a través de la inversión en criptomonedas.

El contar con una herramienta de confianza ayudará, además, esquivar los riesgos que existe en el mercado, como es la volatilidad (fuertes subidas y bajadas de valor) que puede provocar grandes pérdidas en horas.

Sin embargo, existen otros riesgos de los que tendrá que tener cuidado el operador. Uno de los más comunes y que no tienen solución es la pérdida de la clave del monedero. El problema radica en que se trata de una clave que es imposible recuperar.

Aunque pueda parecer un error ‘tonto’, ocurre más de lo que se piensa. Al punto de que entre un 17% y un 23% de las criptomonedas están perdidas en un ‘limbo’ hasta que el operador pueda recordar su clave.