El Gobierno, los sindicatos y los empresarios se encuentran mañana, a las 10.00 horas, para negociar la prórroga de los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) hasta septiembre.
En la reunión anterior, celebrada el pasado 6 de mayo, el Ejecutivo planteó a CCOO, UGT, CEOE y Cepyme una nueva extensión de esta herramienta hasta el 30 de septiembre. Después de esa fecha se evaluará de nuevo si es necesario mantenerlos en otoño.
La idea que tiene el Ejecutivo es que esta nueva prórroga mantenga condiciones similares a las actuales. Lo han dicho tanto la ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, como el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá.
También el secretario general de UGT, Pepe Álvarez, cree que lo más «sensato» es repetir el decreto de los ERTE que estará en vigor hasta finales de mayo.
Efectivamente, la actual prórroga de los ERTE finaliza el día 31 de este mes, pero el Gobierno siempre ha mantenido que se alargarán todo el tiempo que sea necesario.
Tras la reunión celebrada la semana pasada, con la que se dio inicio a estas negociaciones, la secretaria de Acción Sindical de CCOO, Mari Cruz Vicente, también confirmó que se tomará como referencia para la nueva prórroga lo recogido en el acuerdo vigente en estos momentos, aunque con algunas adaptaciones.
De hecho, el ministro Escrivá señaló hace unos días que, aunque en la nueva prórroga se mantendrá el marco general vigente de los ERTE, desde el Gobierno se quiere «poner énfasis» en los incentivos a la reactivación de los trabajadores, como se hizo el pasado verano.
Este debate sobre los incentivos positivos para la activación de trabajadores en ERTE ya se ha tenido con los agentes sociales en anteriores prórrogas, por lo que Escrivá cree que no habrá problemas para llegar a un acuerdo con ellos.
No obstante, los agentes sociales siempre han defendido la necesidad de concentrar las exoneraciones de cotizaciones a la Seguridad Social en los trabajadores que se quedan en el ERTE, no en los que salen.
Sobre los sectores ‘ultraprotegidos’ que actualmente se contemplan en la normativa sobre ERTE, el ministro Escrivá cree que «prácticamente» los sectores ‘ultraprotegidos’ no cambiarán mucho en la próxima prórroga hasta septiembre.
EL ESQUEMA ACTUAL DE LOS ERTE
La última extensión de los ERTE, la que va hasta el 31 de mayo, simplificó los trámites para extenderlos en el tiempo, de forma que no se necesitaran nuevas autorizaciones administrativas, y mantuvo las tres modalidades vigentes por entonces: los ERTE destinados a los sectores ‘ultraprotegidos’ y a las empresas vinculadas a su cadena de valor; los ERTE de impedimento de la actividad, y los ERTE de limitación, los dos últimos pensados para restricciones administrativas temporales adoptadas como medida de freno a los contagios de Covid (reducción de aforos o prohibición de apertura, por ejemplo).
El esquema actual de los ERTE establece exoneraciones de cuotas para los sectores ‘ultraprotegidos’ y empresas de su cadena de valor del 85% para empresas con menos de 50 trabajadores y del 75% para las que tienen más de 50 empleados, tanto para empleados reincorporados como para suspendidos.
En los ERTE por impedimento de actividad, las exoneraciones son del 100% para empresas con menos de 50 trabajadores y del 90% para las que tienen más de 50 empleados en plantilla, mientras que en los ERTE de limitación de actividad las exenciones son decrecientes hasta mayo de 2021. Para empresas de menos de 50 trabajadores, éstas fueron del 100% en febrero, del 90% en marzo y del 85% en abril y serán del 80% en mayo. Para las que tengan más de 50 empleados, estos porcentajes son del 90%, del 80%, del 75% y del 70%, respectivamente.
638.000 TRABAJADORES EN ERTE
A 29 de abril, el número de trabajadores en ERTE era de 638.283 personas, lo que supone 36.621 trabajadores menos que en marzo en la serie revisada y 105.345 menos en función de la fecha de notificación. No obstante, el ministro Escrivá adelantó el pasado martes que esta misma semana se bajaría de la cifra de 600.000 afectados.
Las fechas de solicitud del ERTE y la de sus efectos pueden ser distintas debido a que existe una «cierta disparidad» entre la fecha de notificación y la fecha en la que produce efectos.
De media, en abril hubo 650.180 trabajadores en ERTE, de los que 454.765 estaban en expedientes con exoneraciones a la Seguridad Social.
En comparación con el máximo de trabajadores en ERTE que se alcanzó en abril de 2020, justo hace un año, los trabajadores en ERTE se han reducido en casi 3 millones de personas según la fecha de alta y en 2,75 millones en función de la fecha de notificación. En ambos casos, el descenso en valores relativos es de más del 80%.
Casi un 31% de los trabajadores protegidos actualmente pertenece a la hostelería (servicio de comida y bebidas), con 196.639 afectados por ERTE, el 23,6% del total de afiliados a este sector. Esta actividad, junto con los servicios de alojamiento, concentran casi la mitad de los trabajadores en ERTE. En concreto, los servicios de alojamiento tienen a 104.461 trabajadores en ERTE, el 52,1% del total de sus afiliados.
Las actividades con mayor porcentaje de trabajadores en ERTE son las agencias de viaje (58,2% del total de sus afiliados); los servicios de alojamiento (52,1%), transporte aéreo (41,99%) y actividades de juegos de azar (33,8%), todas ellas incluidas entre los sectores ‘ultraprotegidos’ por los ERTE.
En términos absolutos, la actividad con mayor número de trabajadores en ERTE es el servicio de comidas y bebidas (hostelería), con más de 196.000 afectados, seguido de los servicios de alojamiento (104.461), del comercio minorista (50.145 empleados), del comercio mayorista (33.998), actividades deportivas y de entretenimiento (23.985 afectados) y agencias de viajes (21.789)