El Gobierno prepara un nuevo sistema para calcular la tarifa regulada de la luz, la conocida como PVPC, y a la que suelen estar acogidos los usuarios más vulnerables y las familias numerosas. El objetivo es evitar que la luz se dispare, como se ha visto en los últimos meses, dar estabilidad a los consumidores acogidos a esta tarifa y aprovechar la excepción ibérica para abaratar la factura.
Así lo ha confirmado este miércoles Teresa Ribera, ministra para la Transición Ecológica y el Reto Democrático, que ha explicado que sacará esta medida a consulta pública y se reformará el actual sistema de cálculo de precios de la tarifa regulada. Ribera ya indicó el pasado 23 de septiembre que se estaba preparando un plan de contingencia de ahorro energético.
Con este nuevo sistema Ejecutivo buscará dejar de fijar un precio con referencia a un día concreto y establecer tres referencias temporales distintas para estabilizar los precios: una mensual, otra trimestral y otra con la media anual.
La idea del Gobierno pasa por incorporar referencias a los mercados de futuros progresivamente, hasta representar el 25% en 2023, el 40% en 2024 y el 55% en 2025. Sus cálculos apuntan a que esto reduciría hasta un tercio la volatilidad de la tarifa.
La idea del Gobierno es introducir este nuevo método a partir de 2023, para que en 2025 alcance al 55% de los nueve millones de usuarios que tienen tarifa regulada en España (uno de cada tres usuarios), mientras que el resto están en el mercado libre, donde es la compañía la que establece los precios de la electricidad.
Tres nuevas mediciones para controlar las oscilaciones
«Hoy mismo hemos sacado a información pública el borrador del real decreto por el que cambiamos la tarifa que más utilizamos los consumidores españoles, la tarifa regulada PVPC, que ha sido la que nos ha ofrecido los mejores precios desde su creación porque estaba vinculada directamente al precio del mercado mayorista, de electricidad de cada día», ha explicado la ministra.
Estas nuevas referencias se medirán de forma diferente (10% la mensual, 36 % la trimestral y 54 % la anual) para calcular las medias, y pesará más la media anual, algo que permite dar estabilidad al precio resultante y suavizar así sus oscilaciones.
Ribera ha hecho hincapié en el hecho de que el mercado actual, con precios disparados y volátiles, dificulta la economía de las familias españolas. En el caso de la tarifa regulada, a la que están sujetos el 35 % de los consumidores del país, está indexada a los precios diarios que se registran en el Mercado Ibérico de la Electricidad (MIBEL), lo que provoca que los consumidores estén expuestos a posibles variaciones, como ha pasado desde que comenzó la invasión rusa de Ucrania.
«Por eso hemos hecho una propuesta que estará en información pública durante un mes, para poder enriquecerla, mejorarla, corregirla, reduciendo esa volatilidad, introduciendo distintos indicadores, permitiendo que las referencias a futuro nos aseguren una estabilidad mayor en los precios que pagamos», ha señalado la ministra.
Mientras que actualmente la diferencia entre el precio más barato y el más caro llega ahora al 27% durante el día, con el nuevo sistema ese porcentaje se reduciría al 17%, mientras que la diferencia mensual pasaría del 23% actual al 16%.
Cambiar el cálculo de la tarifa regulada vigente
El real decreto aprobado en mayo por el Gobierno y que puso en marcha la ‘excepción ibérica’ ya se incluía el mandato de modificar la metodología de cálculo del PVPC para incorporar referencias basadas en una cesta de productos a plazo y del mercado diario e intradiario.
Además, el Gobierno se comprometía a realizar, antes de este 1 de octubre, «las modificaciones necesarias» en el anterior real decreto donde se establece la forma de calcular el Precio Voluntario para el Pequeño Consumidor (PVPC) y su régimen jurídico de contratación, para «introducir una referencia a los precios de los mercados a plazo, incorporando en la formulación de cálculo del precio voluntario para el pequeño consumidor una componente de precio basada en una cesta de productos a plazo y del mercado diario e intradiario».
Esta cesta incluirá productos de mercados a plazo, entre ellos, podrán utilizarse futuros anuales, futuros trimestrales y futuros mensuales. También incluirá un componente de precio del mercado diario e intradiario que garantice una cierta exposición de estos consumidores a la señal de precio de corto plazo e incentive la eficiencia energética, el almacenamiento y la gestión de la demanda