El último Barómetro de Opinión realizado por el Centro de Investigaciones Sociológicas revela que los ciudadanos han incrementado su confianza en el sector económico.
Desempleo y pensiones. Esas son las principales preocupaciones económicas del español. Al menos, según los resultados del último Barómetro de Opinión elaborado por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS). En este sentido, los encuestados volvieron a situar el paro como el primer problema nacional, y así aparece en el 65,9 por ciento de los cuestionarios. Se trata de un porcentaje similar al de los meses anteriores, pues ya había bajado del 70 por ciento en septiembre de 2017.
La preocupación por las pensiones continuó aumentando en marzo y, tras duplicar el registro de febrero, ha pasado a ser el quinto problema del país a juicio de los españoles y el tercero que más afecta personalmente a los ciudadanos. Este asunto había marcado puntualmente un 8 por ciento en noviembre de 2017, pero hasta entonces se mantenía entre el 4 y el 5 por ciento, lejos de los primeros puestos; es a partir de enero de este año cuando va multiplicándose la preocupación: un 4,8 por ciento en enero, un 8,9 por ciento en febrero y ahora un 15,5 por ciento.
Detrás repiten la corrupción y el fraude, con un 34,5 por ciento, cuatro puntos menos que en febrero pero por encima de los datos del último trimestre de 2017, y en tercer lugar vuelven a parecer los políticos y la clase política, mencionada en el 26 por ciento de las entrevistas, casi dos puntos más que el mes anterior, pero por debajo del récord del 28,5 por ciento que marcó en diciembre de 2017.
La cuarta posición, según los españoles, la ocupan los problemas económicos en general, con un 19,7 por ciento, que marcan su cota más baja de los últimos años, pues sólo había bajado del 20 por ciento en julio de 2017. En esta categoría genérica los investigadores del CIS agrupan todas las respuestas espontáneas de problemas relacionados con la economía y, durante la crisis, llegó a estar representada en el 50 por ciento de los cuestionarios.
La encuesta se basa en 2.466 entrevistas hechas en 256 municipios de 29 provincias en los primeros 13 días del mes de marzo, unas fechas en las que en Cataluña se hablaba de la investidura de Jordi Sànchez, que no pudo celebrarse al denegar el Supremo su salida de la cárcel, y en las que se gestaban las movilizaciones del Día de la Mujer. En esos días, se seguía la desaparición del niño Gabriel, un caso que acabó el día 11 con la detención de la pareja de su padre y el hallazgo del cuerpo.