Garantizar que todo el alumnado de Primaria de los centros públicos, casi 2 millones de niños, fuera al comedor escolar de forma gratuita costaría a las administraciones 1.664 millones de euros anuales. Para ello, los distintos gobiernos tendrían que aumentar la partida actual de 191 millones en 1.472 millones más cada año, lo que representa una inversión extra equivalente del 0,13% del PIB de España.
Así lo refleja el informe ‘Comedor escolar universal y gratuito: un objetivo alcanzable y urgente’, de Educo, en el que advierte del elevado número de niños que no pueden acceder al comedor escolar a pesar de necesitarlo.
El estudio calcula cuánto costaría que todo el alumnado de Primaria de las escuelas públicas tuviera garantizado el comedor, tanto a nivel estatal como por comunidades autónomas. Actualmente, más de 716.000 niños de primaria asisten al comedor escolar en centros públicos, lo que supone un coste anual de 576 millones de euros.
De este coste, las administraciones públicas competentes se hacen cargo de 191 millones a través de las ayudas y becas, mientras que el resto lo asumen las familias de su propio bolsillo.
Educo pide poner el foco en la infancia más vulnerable
Mientras llega la universalización del comedor escolar, Educo reclama poner el foco en la infancia más vulnerable. «El acceso universal y gratuito al comedor escolar puede ser una realidad, España tiene que aumentar la inversión pública para mejorar la situación de los niños y las niñas y que se cumplan sus derechos. Nos parece alarmante que en España 1 de cada 3 niños esté en riesgo de pobreza y exclusión», ha explicado la directora general de Educo, Pilar Orenes.
En su opinión, los esfuerzos de los gobiernos «deben encaminarse a paliar esta situación» ya que garantizar su acceso al comedor escolar «es uno de los pasos importantes a seguir para que tengan una educación equitativa y las mismas oportunidades».
«Poder comer en la escuela garantiza que estén en un espacio seguro y protegido e incentiva la asistencia a clase por la tarde, lo que ayuda a reducir la tasa de abandono, que en España es del 16%, y el fracaso escolar», ha añadido Orenes.
La ONG defiende que el comedor escolar y el espacio del mediodía son parte del derecho a la educación de los niños y de su bienestar. No solo se garantiza su alimentación, sino que durante ese tiempo siguen aprendiendo hábitos sociales y nutricionales, se fomenta la asistencia a clase, se relacionan con sus compañeros y compañeras, juegan, gestionan conflictos, las familias pueden conciliar y se previenen el sobrepeso o la obesidad infantil, entre otros.
Además del análisis presupuestario, Educo ha realizado un estudio pormenorizado del número de centros públicos de educación primaria que tienen comedor escolar así como del número total de niñas y niños que asisten a este servicio. En este sentido, Educo advierte de que no todas las escuelas cuentan con comedor escolar.
El comedor escolar debe estar garantizado en todos los centros
«Para que todos los niños puedan ir al comedor escolar, lo primero que hay que garantizar es que todos los centros de primaria cuenten con este espacio. Hemos visto que la cobertura es muy dispar dependiendo de la Comunidad Autónoma. Además, a nivel estatal, no todo el alumnado de primaria de los centros públicos va al comedor, porcentaje que varía entre el 4% y el 78% dependiendo del territorio», ha asegurado Orenes.
En España, el 11 por ciento del alumnado recibe alguna ayuda o beca para el comedor escolar, lo que deja a miles de niños y niñas sin acceso a pesar de necesitarlo. Por todo ello, la ONG ha hecho llegar al Gobierno de España y a los gobiernos autonómicos sus peticiones, centradas tanto en la universalización del comedor escolar como en el acceso del alumnado más vulnerable.
También ha puesto en marcha la campaña ‘#AlimentaSuEducación’, para dar a conocer a la ciudadanía la importancia del comedor escolar y el espacio del mediodía.
En 2013, la organización inició su proyecto de Becas Comedor Educo, cuyo objetivo es asegurar al menos una comida nutritiva y completa al día a niños y niñas que lo necesitan tanto en la escuela como durante las vacaciones de verano.
Además, el programa también tiene una parte educativa para que sigan aprendiendo en las horas del mediodía durante el curso escolar y en colonias y actividades de ocio en los meses estivales. Tras 9 años, la entidad ha otorgado más de 52.000 becas y ha facilitado más de 4,3 millones de comidas.