El Banco Sabadell ha rechazado la oferta de fusión del BBVA porque «infravalora significativamente» su proyecto y sus «perspectivas de crecimiento como entidad independiente», según ha informado la compañía catalana a la Comisión Nacional del Mercado de Valores.
En su comunicado, ha añadido que «como entidad independiente generará un mayor valor para sus accionistas«. «La caída significativa y la volatilidad del precio de la acción de BBVA en los últimos días genera una incertidumbre adicional», ha argumentado.
Desde entonces, las acciones del Sabadell se han revalorizado en torno a un 4,5 % y las del BBVA han retrocedido cerca de un 3,3 %. Aunque suele ser algo habitual al anunciar este tipo de operaciones, que el comprador baje en bolsa y el adquirido suba, debido al sobreprecio que se suele ofrecer para que acepte.
El Consejo de Administración ha demostrado la confianza plena «en la estrategia de crecimiento de Banco Sabadell y en sus objetivos financieros». También ha considerado que esta decisión está alineada con el interés de sus clientes y empleados.
El Banco Sabadell prevé generar en 2024 y 2025, junto con los dividendos recurrentes de este periodo, cumpliendo el plan de negocio actual, 2.400 millones de euros.
El BBVA presentó la oferta el pasado miércoles
El BBVA presentó la oferta de fusión con el Banco Sabadell el pasado miércoles que consistía en una prima del 30%, lo que supone un canje de una acción de nueva emisión de BBVA por cada 4,83 títulos de Banco Sabadell.
La oferta pasaba a ser de 2,26 euros por cada acción, frente a los 1,73 euros con los que había cerrado en la bolsa el banco catalán el lunes anterior, un 23% más. Suponía valorar la entidad en más de 12.000 millones de euros.
De producirse la operación, sería la más grande en España desde la de Caixabank y Bankia en 2020. Convertía al BBVA en el tercer mayor banco de Europa tras el BNP Paribas y el Banco Santander y lo consolidaría como el segundo más grande de nuestro país, alejándose de Caixabank.