Las vacaciones veraniegas son uno de los principales gastos a los que se enfrentan familias a lo largo del año y, debido a la situación actual, este 2022 están siendo todavía más caras. Según un informe publicado por el Observatorio Nacional del Turismo Emisor (ObservaTUR), los españoles están gastando una media de 610 euros, casi 50 euros más que en 2021, cuando se realizó un gasto medio de 566 euros. Además, en septiembre llega la vuelta al cole que, según la información publicada por la OCU, en 2021 supuso un desembolso de 1.890 euros por niño, sin contar otros gastos asociados como el servicio de comedor, actividades extraescolares, ruta de transporte… No es de extrañar, por tanto, que muchos españoles se encuentren alarmados ante el incremento que se está produciendo en sus facturas.
Así, según el Informe Europeo de Pagos de Consumidores de Intrum, el 42% de los españoles afirma que sus facturas aumentan a un ritmo mayor que sus ingresos. Una situación que, teniendo en cuenta las últimas predicciones del Banco de España que establecen el IPC en el 7,2% a cierre de 2022, se mantendrá en los próximos meses. De este modo, y según el mismo informe elaborado por Intrum, el 32% de los españoles asegura que, tras pagar todas las facturas de su hogar, dispone de menos del 10% de su sueldo para otros propósitos, nueve puntos porcentuales por encima de la media europea (23%).
La falta de liquidez impide a los españoles pagar sus facturas
A estos gastos anuales se une el importante incremento que están sufriendo los precios debido al aumento histórico de la inflación, con un IPC situado en julio en 10,8%, el dato más alto desde septiembre de 1984. Este incremento de las facturas ya está provocando que haya hogares que no pueden hacer frente al pago de estas. Según se recoge en el informe elaborado por Intrum, el 22% de los españoles afirma que, en los últimos 12 meses, no ha pagado a tiempo alguna de sus facturas. Entre las principales razones de estos retrasos, encontramos la falta de liquidez para hacer frente a los pagos (37%), problemas técnicos (23%) o diversas consecuencias de la COVID-19.
No obstante, liquidar los recibos es una práctica común y, por ello, el 60% de los españoles explica que no haber abonado la factura es un hecho puntual. En este sentido, España se encuentra por encima de la media europea, del 56%. Los estonios (70%), portugueses (69%) y alemanes (67%) se posicionan como los más cumplidores a la hora de pagar sus facturas, mientras que en Letonia (43%), Austria (42%) y Grecia (37%) no pagar las facturas es un hecho más habitual que puntual, según el Informe Europeo de Pagos de Consumidores.