Los precios registran un repunte del 17,7 por ciento en comparación con 2016, según el estudio realizado por Fotocasa.
Compartir piso es una de las fórmulas más económicas para alquilar una vivienda. El valor medio de una habitación es de 318 euros al mes, según indican los datos del estudio realizado por Fotocasa. Un precio que representa un incremento del 17,7 por ciento en comparación con los 270 euros que se pagaban durante 2016 de promedio en las principales ciudades españolas.
“El fuerte repunte de los precios de los alquileres está obligado a muchas personas a tener que decantarse por la opción de compartir, especialmente en las grandes ciudades como Barcelona y Madrid, donde llevamos varios años registrando fuertes tensiones en los precios que ahora se trasladan a los alquileres de los pisos compartidos”, explica Beatriz Toribio, responsable de Estudios de Fotocasa.
Según el informe, el precio interanual se incrementa en siete autonomías. Cataluña y Madrid son las comunidades que más incrementan el precio, en concreto lo hacen un 32,2 por ciento y un 28,9 por ciento. Le siguen Baleares (17,6 por ciento) y la Comunidad Valenciana (12,9 por ciento). En el otro extremo, el precio desciende en nueve comunidades autónomas. La caída más acusada se registra en Extremadura, que desciende el precio un -11,3 por ciento respecto a 2016. Le siguen Murcia (-6,7 por ciento), Galicia (-3,4 por ciento) y Andalucía (-3,1 por ciento).
El análisis revela que la mayoría de ciudades españolas han incrementado los precios de las habitaciones respecto al año pasado. En cuanto a los municipios, Madrid es el que más ha incrementado el precio en el último año, en concreto un 31,3 por ciento, seguido de Barcelona, que sube un 28,7 por ciento respecto a 2016. Palma de Mallorca (23,2 por ciento), Santiago de Compostela (14,6 por ciento), Getafe (13,4 por ciento) y Valencia (13,1 por ciento), le siguen como las ciudades en las que más sube este año el precio de las habitaciones.
“También apreciamos que, como consecuencia del encarecimiento de los alquileres, está cambiando el perfil de la persona que comparte piso. Habitualmente se ha asociado con un estudiante universitario, pero cada vez son más los profesionales en puestos cualificados los que apuestan por esta fórmula ante la imposibilidad de hacer frente al pago de un alquiler de forma individual o porque prefieren destinar lo que se ahorran a ocio, formación u otras actividades”, añade Toribio.
En el otro extremo, diez municipios españoles descienden el precio respecto al pasado año. La caída más acusada se registra en Cáceres (-22,1 por ciento), seguido de A Coruña (-10,2 por ciento), Oviedo (-7,6 por ciento), Badajoz (-7,1 por ciento) y Valladolid (-5,3 por ciento). El único municipio que se mantiene estable respecto a 2016 es Sevilla.