Un fondo de ahorro iniciado de forma temprana puede asegurarnos la calidad de vida para la etapa en la que seremos menos productivos a nivel laboral.
Ante el complicado panorama del sistema de pensiones, es importante buscar alternativas de ahorro privadas para protegerse en una etapa tan vulnerable como la jubilación.
Pese a que desde el Pacto de Toledo se buscan diversas estrategias para asegurar la viabilidad del sistema actual, el cambio demográfico se acelera y complica la situación. Se estima que para 2050, España sea junto a Japón el país más envejecido del mundo, con 78 personas mayores de 65 años por cada 100 activos. En comparación, la media de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) será de 53 años.
Actualmente, ya hay personas que resienten la diferencia de ingresos. En un estudio de 2020, realizado por el Instituto Santalucía, cuatro de diez jubilados en nuestro país aseguraron tener dificultades para llegar a fin de mes. De acuerdo a las conclusiones de la ‘III Encuesta de Jubilación y Hábitos de Ahorro‘, las dos causas fundamentales fueron no haber hecho una buena planificación financiera para esta etapa y la falta de ahorro.
Por esta razón, los fondos de inversión son una herramienta de ahorro ideal pensando a largo plazo, que permita complementar la jubilación y nos asegure la calidad de vida a la que estamos acostumbrados.
Para elegir correctamente un fondo de inversión es importante seguir estos cinco pasos:
1.- Establecer el objetivo de inversión.
En este caso, nuestra jubilación.
2.- Fijar nuestro horizonte temporal.
Es importante entender que a mayor plazo, mayor será el dinero acumulado.
3.- Establecer nuestro perfil de inversor.
Determinar nuestra tolerancia al riesgo nos permitirá elegir los mejores mecanismos para invertir. Hay que tomar en cuenta que todas las inversiones representan un riesgo.
4.- Calcular nuestra liquidez y capacidad de ahorro.
Es fundamental determinar cuánto dinero destinamos para la inversión periódica que establecen estas herramientas, considerando nuestros gastos mensuales más una reserva de liquidez para imprevistos.
5.- Asesorarse correctamente.
Elegir un buen asesor o grupo financiero, que sean profesionales, certificados y con trayectoria en la gestión de fondos de inversión, es importante para evitar un mal manejo de nuestro capital.