Aumentan los sablazos económicos a los españoles.
El próximo mes de enero de 2022 subirá el impuesto de matriculación de los vehículos nuevos. Ya no habrá más moratorias y se aplicará la normativa comunitaria de medición de consumo y emisiones basadas en el ciclo WLTP (Worldwide Harmonised Light Vehicle Test Procedure) para calcular este tributo en base a los tramos de emisiones originales.
Y es que actualmente -hasta el 31 de diciembre de 2021- está en vigor la modificación temporal al alza de los baremos para evitar la subida de este impuesto en buena parte de los vehículos.
De este modo, se congelaba el encarecimiento de los coches en un momento en el sector todavía no ha recuperado las cifras de ventas anteriores a la pandemia (ha encadenado la crisis del coronavirus con las de los microchips). Sin embargo, tal como ha asegurado la a ministra de Hacienda, María Jesús Montero, el Gobierno no prevé ningún aplazamiento adicional.
Al tomar como referencia los datos de emisiones WLTP, hay menos ejemplares exentos de pagar el impuesto y otros que saltan de tramo. Cabe señalar que en realidad no es que el Gobierno suba el impuesto de matriculación sino que, al tomar como referencia los datos WLTP -antes se calculaba con el ciclo menos realista NEDC-, hay menos ejemplares que quedan exentos de pagarlo y otros que saltan de tramo, por lo que acaban pagando más.
Dicho procedimiento de homologación se empezó a aplicar en Europa el 1 de septiembre de 2018 en sustitución del antiguo NEDC con el objetivo de realizar mediciones más realistas tanto del gasto de combustible de los vehículos como de sus valores de CO2. Sin embargo, el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo estableció un régimen transitorio para que este ciclo se activara en nuestro país el pasado 1 de enero de 2021.
De hecho, en esa fecha sí entró en vigor, pero a finales de junio el Congreso aprobó suspenderla hasta 2022, sin efectos retroactivos. Y es que mientras en 2020 un 70 % de los vehículos nuevos que se matricularon en España estuvieron exentos de pagar el tributo por emitir menos de 120 g/km de CO2, en el primer cuatrimestre de 2021 solo dejaron de abonarlo el 35,7 %, según datos de la Agencia Tributaria.
La principal diferencia entre el extinto NEDC y el vigente WLTP es que este último se basa en datos de conducción reales y refleja mejor el consumo en carretera a partir de someter a los vehículos a pruebas de conducción más exigentes. Y esto comporta que las cifras de CO2 obtenidas con el ciclo actual sean mayores que las conseguidas con el anterior, lo que afecta directamente a la tributación del impuesto de matriculación, calculado por tramos de emisiones.
El pasado mes de junio, con la aprobación de la enmienda del PdeCat incluida en la Ley de medidas de prevención y lucha contra el fraude fiscal, se elevó temporalmente el baremo de la siguiente forma: los vehículos con unas emisiones de CO2 de hasta 144 g/km quedaban exentos del tributo; aquellos con cifras situadas entre 145 y 191 g/km estaban gravados al 4,75 %; los que contaminan entre 192 y 239 g/km pagan el 9,75 %; y a partir de 240 g/km deben abonar un gravamen del 14,75 %.
Como hemos dicho antes, a partir del 1 de enero de 2022 se recuperan los tramos originales, por lo que se librarán del impuesto los vehículos que expulsan hasta 120 gr de CO2 por km; los que emiten entre 121 y 160 g/km abonarán un 4,75%; los que se sitúan entre los 161 y 200 gramos deberán pagar un 9,75%; mientras que aquellos que superan esa cifra están gravados con un 14,75 %.