La inversión destinada a reducir la huella de carbono o rebajar el consumo energético en las empresas, limitada por los impagos, entre otras razones.
Para el 71%, el retraso en el abono de facturas también perjudica a la inversión en innovación en las empresas españolas.
El retraso en los pagos que sufre buena parte de las empresas españolas influye directamente en su respuesta sobre temas sostenibles. El compromiso de las organizaciones con la sostenibilidad en sus partidas presupuestarias, en ocasiones se ve mermado ante la falta de liquidez provocada por los impagos.
Se trata de una de las conclusiones del Informe Europeo de Pagos elaborado por Intrum, compañía líder en gestión de impagos. Para 7 de cada 10 empresas españolas los resultados en materia de sostenibilidad mejorarían en su entidad si recibiesen sus pagos a tiempo.
Así, los pagos tardíos están obstaculizando la mejora del rendimiento sostenible del tejido empresarial. Acciones como reducir la huella de carbono, limitar el consumo energético o gestionar eficientemente los residuos están recibiendo una menor dotación presupuestaria de las organizaciones a raíz del aumento de impagos y la inestabilidad económica que eso produce en las cuentas de los negocios, entre otras razones.
De los 24 países encuestados por el estudio de Intrum, las compañías holandesas son las que menos se ven influidas por su situación financiera a la hora de invertir en aspectos sostenibles (67%), mientras que las griegas son las más afectadas (75%). España se sitúa en línea con países como Francia, Italia, Noruega, Austria o Dinamarca.
La inversión en innovación, la otra gran perjudicada por los impagos
El Informe Europeo de Pagos de Intrum también refleja que, a pesar de que la transformación digital ha sido una de las principales medidas implantadas para afrontar la crisis de la Covid-19 por parte de las empresas españolas, nuestro país todavía se encuentra a la cola de Europa en este sentido.
Concretamente, las pymes que han optado por dar un impulso a su presencia digital, según muestra el estudio de Intrum, ocupa el penúltimo puesto, con un 34%.
Esta escasa digitalización tiene su origen, entre otras cosas, en el aumento de los impagos. Concretamente, el 71% de las empresas españolas asegura que, si recibiese antes los pagos de las facturas pendientes, invertiría más recursos en perseguir la innovación a través de su estrategia digital.
Un porcentaje 11 puntos superior al número de empresas españolas que realizaba esa misma afirmación hace un año (60%).
Cifras como estas subrayan la necesidad de que, tanto pequeñas como grandes organizaciones, se conciencien de la necesidad de protegerse de los impagos, poniendo en marcha medidas preventivas como solicitar pagos por adelantado, el seguro crediticio o contar con una empresa de gestión de impagos que agilice la recuperación de la deuda.
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