La Unión Europea ha declarado este martes a Rusia como paraíso fiscal, junto a otros países como Costa Rica, las Islas Vírgenes Británicas y las Islas Marshall, en la última actualización de su lista de jurisdicciones no cooperativas a efectos fiscales. Los aspectos que pueden haber provocado que la organización internacional, a través de su Consejo Europeo, haya incluido al país dirigido por Vladímir Putin en su clasificación negativa podrían ser la falta de compromiso para mejorar su buena gobernanza fiscal o la falta de avances en el cumplimiento de sus compromisos anteriores de implementar reformas necesarias.
Estas reformas exigidas por la Unión Europea deben apuntar a cumplir con un conjunto de criterios objetivos de buena gobernanza fiscal, entre los que se incluyen la transparencia fiscal, la tributación justa y la implementación de estándares internacionales diseñados para prevenir la erosión de la base imponible y el traslado de ganancias. En concreto, esta lista ‘negra’ de la organización internacional recoge actualmente un total de 16 jurisdicciones: Anguila, Bahamas, Costa Rica, Fiyi, Guam, Palaos, Islas Marshall, Islas Turcas y Caicos, Islas Vírgenes Británicas, Islas Vírgenes de Estados Unidos, Samoa Americana, Panamá, Rusia, Trinidad y Tobago y Vanuatu.
La ministra de Finanzas de Suecia, que ostenta ahora la presidencia de turno del Consejo Europeo, Elisabeth Svantesson, ha alentado a estos países a mejorar su marco legal y trabajar para cumplir con los estándares internacionales en materia tributaria, al tiempo que ha felicitado a Jamaica, Uruguay, Macedonia del Norte y Barbados por su salida del documento de situación -conocido como lista ‘gris’- después de haber cumplido con éxito sus compromisos.
La UE declara a Rusia como paraíso fiscal
La organización internacional, a través de su Consejo Europeo, ha recordado que el diálogo con Rusia -que ya se encontraba en la lista ‘gris’ aunque no todavía en la ‘negra’- sobre asuntos relacionados con la fiscalidad quedó paralizado después de su invasión a Ucrania y justifica su entrada en el listado después de que el grupo del código de conducta descubriera que Rusia no había cumplido su compromiso de abordar los aspectos perjudiciales de un régimen especial para las sociedades ‘holding’ internacionales.
Por su parte, las Islas Vírgenes Británicas se incluyen porque se determinó que no cumplían lo suficiente con el estándar de la OCDE sobre el intercambio de información previa solicitud. En cuanto a las Islas Marshall, que ya se sumaron a la lista en 2018, existe la preocupación de que esta jurisdicción, que tiene una tasa de impuesto sobre la renta corporativa nula o solo nominal, atraiga ganancias sin actividad económica real. Además, por primera vez desde que se estableció la lista, se incluye a Costa Rica, al no haber cumplido con su compromiso de abolir o modificar los aspectos nocivos de su régimen de exención de rentas de fuente extranjera.
¿Qué es un paraíso fiscal?
Los paraísos fiscales son territorios donde la creación de sociedades mercantiles es la principal industria. Estos estados ofrecen ventajas a los ciudadanos de otros países que buscan cargas tributarias reducidas. Una prueba es que el impuesto asociado a la actividad de estas entidades es simbólico. Además, estos refugios fiscales protegen el anonimato con contextos legales que dificultan identificar a los beneficiarios de una sociedad determinada.
Algunos de estos países pueden presentar recelo a compartir información con las autoridades de otros estados.
Una característica de un paraíso fiscal es que en él suelen convivir dos regímenes fiscales diferenciados y legalmente separados. Por un lado, el que afecta a los residentes y empresas locales, que están sujetos al pago de impuestos como en cualquier otro país y, por otro, el régimen aplicable a los no residentes, que es el que ofrece tantas ventajas fiscales y que suele prohibir cualquier actividad económica o de inversión dentro de su territorio.
¿Es legal tener una sociedad en un paraíso fiscal?
Estas sociedades pueden ser usadas de forma lícita para fines comerciales o para la exportación, siempre y cuando sus activos y los beneficios derivados de su actividad se declaren a las autoridades del país donde el beneficiario tiene su domicilio fiscal. Es frecuente que grandes empresas instalen sus subsidiarias en alguno de estos territorios para aligerar sus cargas fiscales.
Los factores determinantes por las que una legislación puede considerarse paraíso fiscal.
Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), existen cuatro factores clave son utilizados para determinar si una legislación configura un paraíso fiscal:
- Si la legislación no impone tributos o estos son solo nominales. La OCDE reconoce que cada legislación tiene derecho a determinar si imponer impuestos directos. Si no hay impuestos directos pero sí indirectos, se utilizan los otros tres factores para determinar si una legislación configura un paraíso fiscal.
- Si hay falta de transparencia
- .Si las leyes o las prácticas administrativas no permiten el intercambio de información para propósitos fiscales con otros países en relación a contribuyentes que se benefician de los bajos impuestos.
- Si se permite a los no residentes beneficiarse de rebajas impositivas, aun cuando no desarrollen efectivamente una actividad en el país.