La intervención del Silicon Valley Bank el pasado viernes hizo saltar las alarmas del sector financiero ante el temor de un contagio al resto de la economía, tal como sucedió en la crisis de 2008. El colapso de la entidad americana se considera ya la mayor quiebra bancaria desde la Gran Recesión y una de las más importantes en la historia de Estados Unidos.
De momento, las bolsas mundiales se han teñido de rojo y los gobiernos han anunciado medidas para proteger los depósitos de sus clientes. Pero, ¿cómo se ha llegado a esta situación y qué riesgos tiene para la economía?, ¿puede llegar a España?
¿Qué es el Silicon Valley Bank?
El banco, con sede en Santa Clara (California, EE.UU.), es el decimosexto mayor prestamista del país. A cierre de 2022, contaba con unos activos de aproximadamente 209.000 millones de dólares (195.655 millones de euros) y depósitos por un valor aproximado de 175.400 millones de dólares (164.200 millones de euros), según datos de la Corporación Federal de Seguro de Depósitos (CFSD).
La entidad estaba enfocada principalmente en empresas emergentes tecnológicas -las llamadas startups– y científicas, a las que ofrecía servicios de capital de riesgo y otorgaba préstamos.
Cronología de los hechos
Las alarmas saltaron el pasado jueves, cuando el Silicon Valley Bank anunció una gran ampliación de capital de 1.750 millones de dólares (1.656 millones de euros). El objetivo era hacer frente a las pérdidas de 1.800 millones de dólares (1.704 millones de euros) que la entidad había registrado previamente por la venta de una cartera de títulos de renta fija respaldados con hipotecas de unos 21.000 millones de dólares (19.671 millones de euros).
Ese mismo jueves, las acciones del banco se hundieron un 60%, lo que provocó una desbandada de inversores: en 24 horas salieron 42.000 millones de dólares (39.362 millones de euros) de la entidad. Este movimiento generó grandes caídas en las acciones de SVB por segundo día consecutivo, que terminaron arrastrando unas pérdidas del 68%.
La dirección ejecutiva intentó colocar nuevas acciones para poder sanear las cuentas, pero la situación se agravó y el Departamento de Protección Financiera e Innovación de California tomó las medidas que ya se conocen: procedió al cierre de la entidad y nombró a la Corporación Federal de Seguro de Depósitos como custodio de los depósitos del banco.
¿Cuáles han sido las causas?
Según detalla Efe, el Silicon Valley Bank había invertido el exceso de liquidez logrado durante la crisis de la COVID-19 en bonos del Tesoro a largo plazo, unos activos que se han visto afectados en los últimos meses por la subida de los tipos de interés de la Reserva Federal. Así, el banco no se encontraba bien posicionado para afrontar una situación de aumento de tipos de interés y una ralentización del crecimiento de los préstamos.
En el mes de marzo, la entidad registró «unos depósitos inferiores a los previstos», lo que le llevó a realizar la venta de activos anteriormente citada. A esto se sumó el hecho de que varias compañías de asesoramiento de inversión recomendaron a las empresas emergentes que retiraran su capital del banco, lo que reduplicó las presiones sobre la entidad que finalmente ha sido intervenida.
“Muchas de estas empresas son más vulnerables a las subidas de tipos y han necesitado más liquidez, así como retirar depósitos bancarios. Esto ha llevado al banco a tener que vender activos en pérdidas, lo que ha generado una cierta crisis dentro de sus depositantes, que al seguir retirando más depósitos, pues ha llegado un momento que no ha tenido liquidez y ha necesitado el rescate”, ha resumido en el Canal 24 Horas de TVE el analista de XTB, Joaquín Robles.
¿Qué consecuencias ha tenido?
El colapso del Silicon Valley Bank ha provocado fuertes caídas en la cotización de las acciones de todo el sector financiero, tanto dentro como fuera de Estados Unidos.
En España, el Banco Sabadell y el Santander perdieron el pasado viernes más de un 5 %; en el parqué londinense, HSBC -primer banco de Europa por capitalización- se dejaba también más de un 5 %; mientras que en Fráncfort encabezaba las pérdidas el Deutsche Bank, con más de un 7% de caída. Este lunes, el IBEX 35 ya registra caídas superiores al 3%, al igual que en el resto de selectivos de Europa.
¿Se han tomado medidas?
Además de la intervención de la entidad, los órganos reguladores de Estados Unidos lanzaron este domingo un plan para proteger los depósitos de sus clientes, el cual permitirá que «no asuman las pérdidas» del banco y tengan acceso al crédito. “También pone a disposición de los bancos unas líneas de liquidez para que puedan tener dinero a unos términos mucho más fáciles de lo normal”, apunta el analista. También está previsto que el presidente del país, Joe Biden, se pronuncie al respecto este lunes.
En el caso de Reino Unido, donde esta entidad tenía presencia, el Banco de Inglaterra ha autorizado la venta de la filial británica del SVB -el Silicon Valley Bank UK Limited (SVBUK)- a HSBC, que ha pagado el precio simbólico de una libra. El ministro británico de Economía, Jeremy Hunt, ha precisado que esta «venta privada» se lleva a cabo sin que «los contribuyentes» británicos tengan que asumir este rescate.
Y, en la Unión Europea, la Comisión ha llamado a la tranquilidad frente a la quiebra: aseguran que su presencia en Europa es muy limitada, pero que estarán muy pendientes. No obstante, los ministros de Economía y Finanzas de la eurozona (Eurogrupo) abordarán en su reunión de este lunes sus posibles consecuencias en el sistema financiero de la moneda común.
Mientras, la Autoridad Federal de Supervisión Financiera (BaFin) de Alemania ha impuesto una moratoria a la entidad debido al riesgo para el cumplimiento de las obligaciones con los acreedores, al tiempo que ha ordenado el cierre a los clientes de la sucursal en el país del fallido banco estadounidense, subrayando que «no tiene relevancia sistémica».
¿Se puede contagiar a otros bancos?
Con la caída de SVB se teme que se produzca un efecto contagio que pueda llevar a otras entidades a sufrir problemas de liquidez, tal como ocurrió hace 15 años. Sin embargo, la secretaria del Tesoro estadounidense, Janet Yellen, aseguró que el sistema bancario “sigue siendo fuerte” y admitió que las autoridades están vigilando “con mucho cuidado” una serie de entidades, por si fuera necesario intervenir.
De momento, varias instituciones financieras se han visto arrastradas, como Signature Bank, First Republic Bank o Western Alliance.
Además, se prevé que pueda llegar a afectar a las decisiones sobre política monetaria de las próximas semanas. Y es que se esperaba que la Reserva Federal subiese los tipos de interés entre 25 y 50 puntos básicos, “pero está cogiendo fuerza durante las últimas horas que ni siquiera haya subida de tipos, que se mantenga la expectativa y que si se estabiliza el mercado vuelva a actuar”, apunta Joaquín Robles
¿Puede llegar a España?
“Desde luego, es la gran pregunta que se están haciendo ahora mismo los inversores: si se trata de un hecho aislado o es un problema a mayor escala”, apunta el analista de XBT, quien sin embargo descarta que se contagie a otras entidades del Viejo Continente, más allá del nerviosismo de los mercados que siguen la máxima «primero vende, luego pregunta».
Por su parte, la vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, ha señalado que «están siguiendo muy de cerca las noticias» que llegan desde EE.UU., si bien ha destacado que el sistema bancario español «tiene un marco reforzado tanto de supervisión como regulación», además de «una situación saneada» en sus balances.
En su opinión del experto, ahora lo importante es calmar la incertidumbre que se ha desatado durante las últimas dos sesiones en los mercados y, a partir de ahí, “ya volverse a centrar en el principal objetivo» de los bancos centrales, que es la estabilidad de los precios y el control de la inflación”, ha concluido.